A veces da la sensación de que los ingenieros que se dedican a desarrollar automóviles para batir los récord de velocidad tienen una forma de razonar similar a la de aquellas personas que sufren ciertas obsesiones, como, por ejemplo la crematomanía, o deseo exagerado por acumular dinero y riquezas: no importa cuán abultado sea el saldo de su cuenta bancaria, nunca es suficiente.
Por ese camino parece transitar el preparador texano Hennessey, famoso por sus modelos de altas prestaciones entre los que se destaca el Venom, cuya nueva versión, el F5, busca batir el récord de velocidad.
Para eso, los ingenieros americanos trabajan en los detalles del motor de 1.817 CV, un V8 de 6,6 litros denominado Fury, y en los de la aerodinámica que, por supuesto, es activa.
Los primeros ensayos con este modelo, se realizaron en una pista de aterrizaje de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en Arkansar, un tendido asfáltico de 3,5 kilómetros de extensión en el que el F5 alcanzó los 322 km/h.
Por ahora, esos test se han realizado con la potencia del Fury limitada a 900 CV, motivo por el cual es dado suponer que cuando liberen la potencia total y en una pista más larga (probablemente la del Kennedy Space Center, que mide 5,15 km), el Venom F5 pueda superar el récord que, hasta ahora está en manos del SSC Tuatara, que en octubre de 2020 alcanzó los 508,73 km/h, aunque aún está pendiente de certificación.
Aunque todavía los datos de la velocidad máxima no se conocen, sí se saben los de aceleración: 2,8 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h, 4,7 segundos, para llegar a los 200 km/h, 8,4 segundos hasta marcar 300 km/h y los 15,5 segundos para alcanzar los 400 km/h.
La presentación de la versión definitiva del Hennessey Venom F5 tendrá lugar en el Concours d'Elegance de Amelia Island que se celebrará del 22 al 23 de este mes.
