Familiar, pero salvaje: probamos el nuevo Toyota SW4 SRX AT

Este SUV de siete plazas derivado de la pick-up Hilux recibió una actualización estética y mecánica. Es el vehículo de producción nacional más caro, pero lo respaldan un excepcional nivel de equipamiento de seguridad y aptitudes off-road. Galería de fotos

El segmento de los SUV medianos continúa en franca expansión; sin embargo, son escasos los modelos derivados de una pick-up con chasis de largueros.

Básicos:
Velocidad máxima: 187,2 km/h / Potencia: 204 CV / Consumo promedio: 12,1 km/l / Precio: $ 5.268.600

Diseño/Aerodinámica (✭✭✭✭): Su estilo es más atractivo que el de la Hilux. Se mejoró la aislación acústica de la carrocería.
Confort/Espacio interior (✭✭✭1/2): La refrigeración de las butacas delanteras es un acierto. El habitáculo ofrece buena modularidad, aunque algunos aspectos son mejorables. Plazas traseras justas.
Motor/prestaciones (✭✭✭✭): El aumento de potencia y torque le permitió acrecentar sus prestaciones. El consumo urbano es algo elevado.


Los más: Equipamiento de seguridad • Robustez general • Prestaciones • Garantía.

Instrumental/Equipamiento (✭✭✭✭): La dotación es completa aunque, dado su perfil Premium, peca de algunos faltantes de confort.
Suspensión/Dirección (✭✭✭1/2): Se advierten mejoras en el comportamiento dinámico y el confort de marcha. La dirección no es de las más directas.
Transmisión/Caja (✭✭✭✭): La caja automática tiene un comportamiento agradable. El sistema de tracción 4x4 con alta y baja es elogiable. Ahora cuenta con un nuevo diferencial electrónico de deslizamiento limitado.

Los menos: Precio elevado • Plegado de la última fila de asientos • Algunos faltantes de confort.

Seguridad/Frenos (✭✭✭✭): Discos en las cuatro ruedas y diversas asistencias electrónicas permiten domar a esta fiera de más de dos toneladas. La incorporación del paquete de ADAS es muy bienvenida.
Precio/Garantía (✭✭✭): Sustancialmente, es más caro que su rival directo y otros modelos de su segmento, pero son muchos los factores que hacen que lo valga: la garantía y el servicio de posventa, entre otros.

Toyota SW4 SRX AT

Tal es el caso del Toyota SW4, producido en la planta de Zárate (desde 2005) sobre la misma plataforma de la Hilux, que desde hace algunos años mantiene una reñida rivalidad con el Chevrolet Trailblazer fabricado en Brasil sobre la arquitectura de la S10. Desde entonces -al menos en nuestro mercado-, el Sport Utilty de origen nacional siempre tuvo mayor aceptación que su par brasileño, además de ser un producto más refinado.

Al igual que la Hilux, el SW4 recibió recientemente una actualización estética que vino acompañada de mejoras en el conjunto mecánico y la dotación de seguridad. Manejamos la versión full de una gama que está disponible únicamente con motor Diesel y tracción 4x4: las variantes con motor naftero y tracción 4x2 se siguen produciendo en el país, pero su destino es exclusivamente de exportación.

Toyota SW4 SRX AT

Un plus visual

Tratándose de una actualización estética, los cambios no son muy significativos, pero permiten rejuvenecer el estilo de un vehículo imponente, que de por sí siempre fue más atractivo que la Hilux. Estructuralmente hablando mantiene sus dimensiones externas: 4,79 metros de largo y 2,74 cm de distancia entre ejes, y cuenta con un generoso despeje del suelo de 22,7 cm, acentuado en esta versión tope de gama (SRX) por sus llantas de 18 pulgadas de nuevo diseño, en vez de las de 17” de la SR.

Las modificaciones más trascendentes se advierten en la parrilla frontal. Allí se reemplazó la característica grilla cromada por un material opaco, mientras que la insignia de la marca consta de un aplique transparente y gomoso al tacto. Por su parte las ópticas, rediseñadas, son ahora ciento por ciento de led, en tanto que los bajos del paragolpes delantero también fueron reformulados, al igual que las luces antiniebla.

Toyota SW4 SRX AT

Como es habitual en este modelo, el habitáculo toma distancia del de la pick-up y presenta terminaciones más sofisticadas. Tal es el caso de algunos revestimientos, como por ejemplo el cuero sintético sobre la plancha de a bordo y en los paneles de puertas (antes de color marrón, ahora gris oscuro), y el símil madera en la parte superior del aro del volante y la consola central.

Estéticamente no se advierten mayores modificaciones puertas adentro, amén del cambio de color y la serigrafía del tablero de instrumentos.

Toyota SW4: confort para siete

Quien se ponga al volante encontrará con facilidad una adecuada postura de manejo gracias a la doble regulación de la columna de dirección y los ajustes eléctricos de la butaca. Los asientos delanteros son mullidos, y en esta versión incorporan refrigeración, elemento que se agradece sobremanera en esta época del año, sobre todo si el vehículo estuvo expuesto al sol antes de usarlo.

Toyota SW4 SRX AT

Las plazas traseras también son muy amplias, aunque el asiento central es un tanto duro y está en una posición más elevada: dependiendo de la contextura física de su ocupante, la comodidad podría verse comprometida, aunque para mitigar ese inconveniente se pueden reclinar los respaldos.

También los cojines de la segunda fila pueden desplazarse longitudinalmente. Esto permite ganar espacio para las piernas si no está en uso la última fila, o bien equilibrar el ambiente y beneficiar a “los del fondo” (preferentemente niños, dado el espacio).

Cabe destacar que sobre la consola central los pasajeros del medio cuentan con un toma de 12V y una muy útil salida de 220 voltios.

Toyota SW4 SRX AT

Además, tanto la segunda como la tercera fila de asientos disponen de salidas individuales de climatización desde el techo, con forzador y regulador de temperatura digital: así se explica la ausencia de un techo solar eléctrico en este modelo, ya que es en esa zona por donde pasan los conductos de la climatización.

Con 253 litros en posición normal, el espacio del baúl alcanza para un par de bolsos medianos. Si inutilizamos la tercera fila, la capacidad se amplía considerablemente, pero dada la forma en que se abaten las plazas de atrás (colgando hacia los laterales) terminan siendo una molestia. Aquí Toyota continúa apostando por esta poco práctica resolución que, además, tampoco sirve para que la rueda de auxilio vaya guardada adentro.

Toyota SW4 SRX AT

Un paso adelante

La mecánica de la nueva SW4 corrió la misma suerte que la de la Hilux. Si bien conserva el conocido y confiable motor 2.8 Diesel con cadena de distribución, este impulsor recibió algunos ajustes tanto en el turbocompresor (de mayor tamaño), como en la electrónica, para incrementar su potencia y torque: de 177 a 204 caballos, y de 45,8 a 50,9 kgm, respectivamente.

Estas modificaciones le confirieron más poder de reacción ante los designios del pie derecho, permitiéndole mejorar sustancialmente las prestaciones de su antecesor: durante nuestras pruebas obtuvimos una velocidad máxima de 187,2 km/h (170,3 km/h en el anterior), aunque, en rigor, no es un dato relevante para el usuario de esta clase de vehículos.

Toyota SW4 SRX AT

Lo más interesante es comparar los registros de aceleración de 0 a 100 km/h, donde redujo su marca de 13,4 a 10,7 segundos, mientras que el valor de recuperación de 80 a 120 km/h -que da una idea de su capacidad para realizar un sobrepaso en la ruta-, también disminuyó notablemente: de 8,9 a 7,5 segundos.

Evidentemente, aquí cumple un papel determinante la combinación con la transmisión automática de seis velocidades, de agradable comportamiento, que se destaca por tener un plus de exigencia en vueltas al inicio, hasta lograr la inercia necesaria para llegar a una velocidad constante de manera más relajada.

Toyota SW4 SRX AT

Esta característica tiene su correlato en el rendimiento de combustible, con una mejora del consumo en ruta (15,8 y 11,6 km/l a 90 y 120 km/h, respectivamente), aunque el promedio es prácticamente el mismo que el de su antecesor (12,1 km/l), penalizado por el elevado consumo urbano (9,1 km/l).

Dinámicamente se advierte un paso adelante en el confort de marcha, con una reducción al mínimo de la sensación de rebotes sobre superficies muy irregulares: esta es una característica muy marcada respecto de la Hilux que probamos recientemente, ya que la pick-up tiene eje trasero rígido con elásticos, mientras que el SW4 utiliza resortes helicoidales.

Toyota SW4 SRX AT

Pese a tratarse de un vehículo con un elevado centro de gravedad y trochas más angostas que las de un Sport Utilty con chasis “monocasco”, las inclinaciones de la carrocería se mitigan rápidamente gracias a la intervención electrónica del control de estabilidad. Sin embargo, la dirección podría ser más directa para garantizar una mejor sensación a alta velocidad, permitiendo, además, utilizar menos el volante en maniobras ajustadas. En las pruebas de frenado los cuatro discos ventilados funcionaron adecuadamente, parando en línea recta las poco más de dos toneladas de peso.

Cabe destacar que el SW4 es uno de los pocos SUV de su segmento con verdadera tracción 4x4.

Toyota SW4 SRX AT

Cuenta con caja reductora (alta y baja) y un nuevo diferencial electrónico de deslizamiento limitado, elementos que, sumados al mejor aprovechamiento del torque y los asistentes de arranque y de descenso en pendientes, le permiten aventurarse por caminos donde sus rivales no se atreverían.

Seguridad, ante todo

El nuevo SW4 ofrece una dotación acorde al uso de una familia numerosa. Además de los elementos mencionados anteriormente, se destaca el renovado sistema multimedia con pantalla táctil de ocho pulgadas que, a partir de ahora, es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.

Toyota SW4 SRX AT

Ofrece, además, TV satelital, cámara de marcha atrás, navegador satelital, Bluetooth y nuevos parlantes JBL ubicados sobre el torpedo.

Por tratarse de un vehículo que apunta a un target Premium, podemos recriminarle algunos faltantes, como cargador inductivo para celulares y más puertos USB para los pasajeros de atrás, además de la utilización de superficies blandas en algunas partes del habitáculo.

Ahora bien, en materia de seguridad el listado es muy completo: equipa de serie siete airbags, control de tracción y estabilidad, anclajes para sillas infantiles y nuevos sensores de estacionamiento (delanteros y traseros).

Toyota SW4 SRX AT

Además, esta variante full incorporó el paquete Toyota Safety Sense, denominación de la marca japonesa al conjunto de asistencias a la conducción (ADAS), que incluyen dispositivos tales como, por ejemplo, sistema de pre-colisión frontal, control de velocidad crucero adaptativo y alerta de cambio de carril.

Si bien el espectro de opciones es muy amplio en este segmento, el SW4 compite conceptualmente con el Chevrolet Trailblazer. Es más caro que su rival brasileño (5.753.300 frente a 5.541.900 pesos), aunque esa diferencia se respalda en la calidad percibida y el nivel de equipamiento superior. La garantía es otro de sus fuertes: 5 años ó 150.000 kilómetros.

TOYOTA SW4 2021: FICHA TÉCNICA Y PRESTACIONES