A sus 18 años, Mick Schumacher, que actualmente compite en la Fórmula 3 Europea, se puso a los mandos del Benetton F1 B194 para conmemorar el 25° aniversario de la primera victoria de su padre Michael en la categoría, hecho que sucedió el 30 de agosto de 1992, cuando contaba con 23 años.
En esa ocasión también lo hizo con un Benetton, y el que sería siete veces campeón del mundo iba a lograr cinco triunfos más en el mítico circuito de Spa (en realidad seis más, pero sería desclasificado en 1994), un récord todavía no igualado: de los pilotos actuales, Kimi Raikkonen lo logró en cuatro oportunidades, Lewis Hamilton en tres contando con el triunfo de este 2017 en su GP 200, y Sebastian Vettel en dos.
Mick lució un casco que incorporaba en su diseño actual, una mitad con los colores del de su padre. El joven piloto, que estuvo acompañado de Sabine Kehm, quien fuera manager de su padre y lo es ahora de él mismo, además de portavoz de la familia, declaró haber sentido “un placer absoluto” y “una gran felicidad” por haber dado esa vuelta: “Fue una emoción muy grande, no sólo por mi padre, sino porque hay mucha historia aquí”.
Cuando se le comentó acerca del récord de 68 poles que Hamilton viene de igual con su padre, fue muy claro: “Siempre recuerdo la carrera de mi padre, pero los records están para ser batidos, así que felicito a Lewis por su logro”.
