Finalmente, y tal como estaba previsto, la casa RM Sotheby's subastó el Lamborghini Huracán RWD perteneciente al Papa Francisco el pasado fin de semana en el Foro Grimaldi, en Montecarlo.
Este superdeportivo personalizado fue vendido en 715.000 euros, monto que se entregará directamente al sumo pontífice, quien decidió asignarlo a distintas obras benéficas, tales como la reconstrucción de casas y lugares de culto de cristianos en la llanura de Nínive, en Irak; a mujeres víctimas de la trata y prostitución, y a dos asociaciones italianas que trabajan en África, con proyectos dirigidos principalmente a mujeres y niños.
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Cabe recordar que este ejemplar único había sido donado por la automotriz italiana el 27 de noviembre de 2017, y que fue exhibido en el museo que la marca posee en Sant’Agata Bolognese hasta el momento de la ceremonia de la subasta.
El súper papamóvil fue creado por Ad Personam, el departamento de personalización de Lamborghini. A modo de homenaje a los colores de la bandera de la Ciudad del Vaticano, está pintado en blanco Monocerus, con rayas amarillas Tiberino que corren a lo largo de la carrocería.
El poderoso modelo está equipado con un motor V10 aspirado de 5.2 litros que transmite sus 580 CV de potencia al eje trasero. La versión de serie tiene una capacidad de aceleración de 0 a 100 km/h en 3 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 320 km/h.
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