Porsche anunció que abandona oficialmente el mercado de vehículos con motor Diesel. La marca explicó que va a dejar de producir y vender sus actuales modelos que responden a dicha característica y que se centrará en los motores nafteros, híbridos y eléctricos.
La confirmación llega tres años después de que explotara la polémica con los motores diesel del Grupo Volkswagen. "La crisis nos causó muchos problemas, la imagen se vio afectada", reconoció Oliver Blume, CEO de Porsche AG.
Ya en febrero de este año, la compañía había eliminado de su oferta el Panamera y el Macan, luego de analizar que durante 2017 la cuota de diesel en su gama apenas había significado un doce por ciento del total de sus ventas globales.
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Un detalle no menor es que el gobierno de Alemania decidió prohibir estos propulsores en varias ciudades del país, como por ejemplo en Sttugart y Hamburgo, una medida que lógicamente adelantó la decisión del fabricante.
"Porsche no está demonizando el diesel. Es y será una importante tecnología de propulsión. Nosotros, como fabricante de modelos deportivos, para los que el diesel juega un papel secundario, hemos llegado a la conclusión de que queremos un futuro sin diesel", expresó Oliver Blume. Y añadió: "Seguiremos cuidando a nuestros clientes actuales con autos de gasoil con la profesionalidad que se espera de nosotros".
La empresa planea invertir seis mil millones de euros en la tecnología de autos eléctricos para 2022, en tanto que para 2025 tiene la intención de ofrecer una variante híbrida o eléctrica de todos sus modelos. De hecho, según Porsche, el 63 por ciento de las Panameras vendidas en Europa ya son híbridas.
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En 2019 aparecerá la nueva joya del fabricante: el Taycan, el primer modelo completamente eléctrico, que promete una potencia de 600 CV y una autonomía de unos 500 kilómetros.
