Rurales que resisten: probamos la Mercedes-Benz E 220d All Terrain

Representante de un concepto que tiende a desaparecer, combina lo mejor de varios universos: amplio interior, supremo confort de marcha, consumo contenido y la versatilidad que ofrecen la tracción integral y la suspensión neumática. Galería de fotos

Los SUV le cambiaron la cara al mercado. Estos modelos, hoy las estrellas del universo automotor, han escalado posiciones hasta convertirse en las piezas más preciadas por los compradores. Según datos de la consultora internacional JATO, en 2017 representaron el 34 por ciento de las ventas globales (al cierre de esta edición, los datos de 2018 no estaban aún disponibles), una participación más que importante y que afecta a todos los segmentos: tanta presencia tienen estos vehículos, que en la actualidad casi no quedan marcas que no ofrezcan uno, y las que no lo tienen están proyectando el suyo.

Como vemos, una historia de éxitos. Sin embargo, ese camino de crecimiento exponencial de los SUV fue también el sendero que llevó a otros modelos hacia el olvido, entre ellos los rurales, aquellos productos también conocidos como familiares o breaks, según la procedencia. Hacer un detalle pormenorizado de los porqués de esta “masacre” excede el propósito de esta nota, pero podemos resumirlo diciendo que, de alguna manera, los SUV y los rurales representan conceptos similares.

MERCEDES BENZ E 220D

Sin embargo, y aunque en mercados como el nuestro estas unidades escasean cada vez más, en Europa, por ejemplo, mantienen una tibia vigencia, suficiente como para resistirse a desaparecer. Entre esos modelos aparece el Mercedes-Benz Clase E Estate, un histórico referente del segmento que forma parte de la familia de modelos más vendidos en el mundo de la marca alemana. En nuestro país se ofrece en una única versión, E 220d All Terrain, con una configuración particular: motor Diesel, caja automática de novena, tracción integral y suspensión neumática, que lo hacen (vaya paradoja) único en su especie en nuestro mercado.

Básicos:
Velocidad máxima: 222,7 km/h // Potencia: 194 C // Consumo promedio: 16,4 km/l // Precio: u$s 97.500

Resumen:

Diseño-Aerodinámica (★★★★): No es la más agraciada, pero sí la más funcional: diseño en función del Cx, de los mejores del segmento.

Confort -Espacio interior (★★★★): Muy amplio y de destacada calidad. Atrás, el túnel de la transmisión limita la plaza central. Baúl muy amplio.

Los mas: Calidad general • Espacio interior • Capacidad del baúl • Confort de marcha • Prestaciones

Motor-Prestaciones (★★★★1/2): El propulsor es ultraeficiente. Los 194 CV parecen más. Desarrolla prestaciones muy interesantes, con consumo contenido.

Equipamiento-Instrumental (★★★1/2): La dotación de la que dispone es muy amplia, especialmente en confort, ya que notamos algunos faltantes en seguridad. No tiene rueda de repuesto.

Suspensiones-Dirección (★★★★1/2): El sistema Body Air Control de suspensión neumática ajusta la altura según el tipo de manejo. Superconfortable en ciudad, firme en ruta y efectivo en el off-road.

Transmisión-Caja (★★★★): La tracción integral es un plus en seguridad y eficacia de circulación. La caja de nueve marchas casi nunca utiliza el último engranaje.

Los menos: Plaza central trasera • Faltantes de equipamiento • Sin rueda de repuesto • Precio • Garantía

Seguridad-Frenos (★★★1/2): Frena como los mejores, en distancias cortas y sin perder la línea, pero por su categoría y precio tendría que sumar más elementos en la dotación de este rubro.

Precio-Garantía (★★★): Sin rivales a la vista, su precio es elevado y la garantía corta para un producto de su jerarquía.

Estilo singular

Puede gustar o no, pero nadie dejará de mirar a esta enorme ballena blanca (mide casi cinco metros de longitud) cuando avanza por la ciudad. Más allá de cualquier controversia estética, lo mejor del diseño del Clase E Estate All Terrain es su coeficiente de resistencia aerodinámica: Cx 0,28. Presentado así, ese valor no dice mucho, pero en la práctica se traduce en grandes beneficios. Uno de ellos –y que hace al ADN de Mercedes-Benz– es la respuesta de la carrocería frente al viento, que genera menos ruido, y, por ende, la marcha es más silenciosa y confortable.

Es que esa comodidad es una de las claves de este modelo, y a este punto contribuyen de manera decisiva los trenes de rodaje con suspensiones neumáticas que, por supuesto, se ajustan en altura, bajando hasta un mínimo de 120 mm cuando el selector de modos de conducción se ubica en Sport, y encontrando su máximo (156 mm, hasta 35 km/h) en la posición All Terrain. Alguien dirá que 156 mm es poco para realizar trayectos fuera del camino, y estará en lo cierto, pero recordemos que se trata de un rural con mayores aptitudes, seguramente mucho mejor preparado que muchos de los tan de moda SUV. Por supuesto que esa condición de comodidad también aparece en el interior.

MERCEDES BENZ E 220D

La calidad de materiales y terminaciones es destacada, aunque algunos detalles privilegian las tendencias de moda por sobre la elegancia tradicional; por ejemplo, el sistema de iluminación interior con luces que recorren determinados sectores del habitáculo, y cuya tonalidad se puede modificar al gusto del usuario. Las butacas delanteras son eléctricas y cuentan con memorias (también son calefactables), motivo por el cual la posición de manejo será siempre la ideal, ya que el volante también se ajusta eléctricamente en altura y profundidad. Todos los comandos están al alcance de la mano del piloto, pero los más interesantes son los de tipo pad que aparecen en la consola central, junto al comando giratorio tipo joystic: desde ambos, el conductor tendrá el control de todos los dispositivos y sistemas.

También hay comandos táctiles en el volante multifunción. Los ajustes de los diferentes sistemas aparecen en la gran pantalla de 12,3 pulgadas de alta resolución, donde también se ven las imágenes que transmite la cámara de marcha atrás, el sistema de audio, el de climatización y los seteos del vehículo, entre otros. Esta pantalla se complementa con el display que aparece en el tablero, justo en el medio de los dos instrumentos principales, velocímetro y tacómetro, ambos de aguja. Los de nivel de combustible y temperatura de líquido refrigerante son digitales, de segmentos luminosos e imprecisos. Las plazas traseras son amplias, pero en la ubicación central la comodidad se ve limitada por la presencia del túnel de la transmisión.

MERCEDES BENZ E 220D

También es muy grande el baúl: ofrece una capacidad de 670 litros que se pueden ampliar hasta 1.820 litros abatiendo los respaldos traseros a través de un comando eléctrico que se acciona desde teclas instaladas en ese sector de carga. El piso de esa zona es rígido, y sobre él aparece una alfombra de muy buena calidad. Debajo de ese piso no hay una rueda de repuesto, ni siquiera del tipo temporal: hay que conformarse con un kit de reparación con compresor. El portón ofrece apertura y cierre eléctricos que se operan desde el interior o con la llave. No cuenta con sistema de apertura “manos ocupadas”, aquel que se acciona pasando el pie por debajo del sector trasero del vehículo.

Mucho, pero no todo

Este modelo se vende en la Argentina por 97.500 dólares, valor que supone que estamos frente a un vehículo lleno de virtudes; entre ellas, el nivel de equipamiento.  Sin embrago, no es tan así. El Mercedes-Benz E 220d Estate All Terrain ofrece una importante dotación en materia de confort, con equipos destacados como acceso sin llave, sistema de sonido Burmester, climatizador de tres zonas, techo solar panorámico, cámara 360 y puerto de carga inalámbrica para celulares, entre otros (ver listado en página 67).

Pero, en el apartado seguridad, podría ofrecer algo más. En la ficha leemos siete airbags, controles de tracción y estabilidad, ayuda al arranque en pendientes, alerta de cansancio del conductor, ABS con asistente de emergencia, sistema Pre-Safe (ante un choque inminente, acomoda los diferentes elementos, como butacas y apoyacabezas, y prepara los sistemas de seguridad para que se activen más rápidamente) y anclajes Isofix, pero no encontramos, por ejemplo, control de velocidad crucero adaptativo, sistema de frenado automático de emergencia, alerta de cambio involuntario de carril o sensor de ángulo ciego, por mencionar sólo algunos de los que actualmente se pueden encontrar en modelos de menor jerarquía.

Viene con urea

Es, además, uno de los pocos modelos Diesel de la actual oferta de Mercedes-Benz en la Argentina, y, como dijimos, el único rural. Utiliza un motor de cuatro cilindros alimentado por un sistema de inyección de alta presión Common Rail con  turbo de geometría variable e intercooler, que se comporta de manera destacada. Entrega 194 CV a 3.800 rpm y trabaja conectado con una caja automática de nueve velocidades (con posición secuencial y levas en el volante) que reparte el torque de generosos 41 kgm disponibles entre las 1.600 y 2.800 rpm entre las cuatro ruedas.

MERCEDES BENZ E 220D

Esa configuración –sistemas de conducción mediante– le permite adentrarse en terrenos de mediana complejidad gracias a la función All Terrain, aunque la extensa distancia entre ejes (casi tres metros) y los pronunciados voladizos (especialmente el trasero) limitan su rango de acción. Pero en el asfalto es un “caso serio”. El desempeño de este paquebote es sobresaliente; apenas muestra alguna leve falencia cuando en procesos de aceleración aparece un mínimo retardo de la caja al pasar de primera a segunda.

Por supuesto, en salidas con partida detenida se advierte cierta pereza, aunque en realidad tiene que ver con el esfuerzo que hace el torque para romper la inercia de los 1.605 kg y la resistencia que oponen los diferenciales. Pero, en cuanto se mueve, las prestaciones son muy interesantes: en nuestras pruebas aceleró de 0 a 100 km/h en 9 segundos y alcanzó una velocidad máxima de 222,7 km/h.

Los consumos también fueron muy buenos, con excelentes 16,4 km/l de rendimiento promedio. De este dato surge que la autonomía es también excelente: con un tanque de 66 litros, el rango de acción supera los mil kilómetros. Otro dato a tener en cuenta es que utiliza el sistema de filtro de partículas Diesel conocido como FAP, y eso implica la carga de urea o AdBlue, que se aloja en un depósito de 25 litros cuya boca de carga está en el mismo módulo que la del tanque de gasoil grado 3.

Características únicas

La resistencia de los rurales está protagonizada por pocos (muy pocos) modelos.  Pero el único con motor Diesel y tracción integral es el que aquí analizamos. Como ya señalamos, su valor de venta es de 97.500 dólares, un precio por cierto elevado, pero que no está lejos del único vehículo con el cual podemos vincularlo, el Audi A6 Allroad 3.0 TFSI S-tronic quattro que cuesta 96.500 dólares, pero su motor naftero, un  V6 de 333 CV de potencia y 45 kgm de par.

Curiosamente, la garantía que Mercedes-Benz ofrece para el E 220d Estate All Terrain es de dos años sin límite de kilometraje, un plazo muy corto en un mercado en el cual hay marcas generalistas que cubren a sus modelos por hasta cinco años.