Somos argentinos y, como tales, "bagajeros". Sí, la mayoría de nosotros llevamos cosas de más a las vacaciones y volvemos con el doble de equipaje. Al menos una vez en tu vida seguro viviste una salida así. Lo que ahora te proponemos es analizar qué es lo que pasaría con todos esos bolsos, valijas, bolsas y bolsitas, que en general van sin asegurar, en caso de accidente. En este video de menos de un minuto te damos la respuesta:
En las imágenes se observa cómo la súbita deceleración del vehículo, que se detiene por completo con el impacto, hace que los bultos no asegurados a la estructura del vehículo sean empujados hacia delante, agravando considerablemente las consecuencias de un choque que podría no tener graves resultados para los ocupantes.
Los bolsos que van en la luneta atraviesan el habitáculo con suma facilidad hasta impactar con los pasajeros de la parte delantera, mientras que los bebés y niños dummies de los asientos traseros son aplastados sin piedad por la carga de la parte inferior. Lo del kayak convertido en misil balísitico es otro tema.
Asimismo, hay que tener en cuenta que una carga anómala del vehículo tendrá una influencia directa sobre el comportamiento dinámico del auto, más allá de las discusiones por "si llevás demasiado equipaje para tres días que nos vamos".
La primera variable afectada es el peso, ya que aumenta la masa total en movimiento, lo que deriva en forma directa en un incremento de las fuerzas que intervienen en cada operación al volante. Arrancar costará más esfuerzo (y más combustible), necesitaremos más metros para detener el vehículo y la fuerza centrífuga nos querrá llevar con mayor insistencia hacia el exterior de las curvas.
En segundo lugar, las geometrías del vehículo también cambian al situar generalmente todo el equipaje en la zona trasera, hundiendo el eje posterior y, en algunos casos, elevando el anterior, lo que también incide de manera relevante al momento del manejo.
Asimismo, sabemos que debemos ocupar primero la zona de carga con nuestros bolsos y que, cuando se llene, recién podremos colocar equipaje en los asientos (siempre que no estén ocupados, claro). Pero lo más correcto es usar el sentido común y reducir el equipaje todo lo que sea posible para no tener bultos potencialmente peligrosos a nuestro alrededor.
Si aún queriendo no exagerar necesitás llevar muchas cosas, las bacas, portaequipajes y portabultos aerodinámicos son soluciones fáciles, rápidas y que encontrarás en cualquier comercio si sos de los que viajan con la casa a cuestas. Incluso un remolque es una salida mucho más segura.
No obstante, tenés que tener en cuenta que la ficha técnica de tu auto te ofrece las cifras que limitan tanto la masa máxima autorizada como la capacidad de remolcado, incluyendo a los ocupantes.
