El Rugido de lo clásico

Cuáles son las sensaciones de este modelo que cautiva a todos con un estilo clásico combinado con potencia y una conducción única. Galería de fotos

Redacción Parabrisas

En una ciudad donde el asfalto vibra con el pulso del tráfico y las rutas bonaerenses invitan a escaparse un fin de semana, la Royal Enfield Interceptor 650 se presenta como una propuesta irresistible. Esta moto, que fusiona el encanto retro de los años 60 con la fiabilidad moderna, no solo seduce por su diseño, sino también por su desempeño en las calles y los caminos abiertos. Con un precio competitivo, financiación accesible y una garantía extendida, la Interceptor 650 se consolida como la compañera ideal para quienes buscan estilo, potencia y una experiencia de conducción auténtica.
Royal Enfield
Se trata de un Ícono Neo-Retro con un diseño que parece sacado de un taller de los años 70, pero con la precisión de la ingeniería actual. Su tanque en forma de gota (13.7 litros), faro LED redondo y escapes dobles cromados evocan la herencia de los modelos de antaño. Su faro LED  ilumina con potencia las rutas nocturnas, y los puños y manetas ofrecen comodidad. El tanque cromado con llantas de rayos es imbatible a la vista. Subirse a la Interceptor 650 es una experiencia inmediata de confianza. Con un asiento a 804 mm de altura y un manillar ancho, la postura erguida resulta natural, ideal para sortear el caos de avenidas o para disfrutar de un paseo relajado. Sus 202 kg en seco (más de 218 kg con combustible) se sienten bastante al maniobrar en parado, pero una vez en movimiento, la moto se transforma.
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El motor bicilíndrico en paralelo de 648 cc, refrigerado por aire y aceite, entrega 47 CV y 52 Nm de torque, con un 80% de este último disponible desde las 2,500 rpm. Esto se traduce en una respuesta elástica que permite circular a bajas vueltas en la ciudad (40-50 km/h en sexta) o acelerar con autoridad en la ruta. La caja de seis velocidades, con embrague antirrebote, es suave y precisa, mientras que el sonido grave de los escapes dobles convierte cada aceleración en una experiencia sensorial.
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En algunos tramos la Interceptor mostró su versatilidad. Las suspensiones (horquilla de 41 mm con 110 mm de recorrido adelante y doble amortiguador con gas atrás) absorben bien las irregularidades, aunque en caminos de ripio, las cubiertas no son ideales. En asfalto, la moto dobla con precisión, y los frenos (disco de 320 mm adelante y 240 mm atrás) con ABS de doble canal, que ofrecen una frenada progresiva sin intrusiones molestas. El único punto débil es el asiento, que podría beneficiarse de mayor acolchado en viajes largos, y un indicador de combustible impreciso que obliga a estar atento a las estaciones de servicio.
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Accesibilidad y Valor Agregado

La Interceptor 650 no solo se destaca por su diseño y desempeño, sino también por su precio a 12.600.000 pesos es una opción imbatible en el segmento de cilindrada media-alta. Royal Enfield Argentina ofrece financiar el 60 por ciento del valor en 12 cuotas sin interés, con un pago inicial del 40 por ciento, haciendo que esta máquina sea accesible para un público amplio. Además, la marca premia el mantenimiento responsable: quienes cumplan con los services oficiales durante los primeros tres años reciben una extensión de garantía de dos años, totalizando cinco años de cobertura.

Por: Augusto Brugo Marcó