Nacidos por capricho

Los superautos son todo un estilo de vida. Para un cineasta neoyorquino no hay como el que lleva su propio apellido como marca, inspirado en un auto de Le Mans. “El diferente” de su tipo. Galería de fotos

Redacción Parabrisas

Quizás nunca escuchaste nombrar a James Glickenhaus, un ex director y productor de cine neoyorquino, que también tiene en los autos una gran pasión. Ese fervor lo llevó a pedir en 2005 que le fabricasen exclusivamente una Ferrari Enzo diferente. Aquel auto que costó 4 millones de dólares fue denominado Ferrari P4/5. La había diseñado Pininfarina y era más rápida, aerodinámica y hasta más atractiva que la Enzo original.

Pero eso no fue suficiente para este millonario, que unos años más tarde comenzó a fabricar sus propios modelos exclusivos.

Actualmente el SCG 003 no es un superauto cualquiera. Su diseño no imita a ningún auto de producción, sino que toma la inspiración en prototipos de Le Mans, como los de la categoría LMP1. Y en ese sentido mal no le va, porque el batió el record de tiempo para autos de producción en Nürburgring, marcando 6 minutos 43 segundos, unos 14 segundos más rápido que el Porsche 918 Spyder, que hasta ese momento tenía la marca.

Pero estos autos tan exclusivos y especiales pensados para pocos causan una pasión difícil de explicar. Para conocerlos mejor, utilizando el SCG 003 como ejemplo, analizamos cómo están hechos y qué ofrecen como características diferenciadoras para convertirse en verdaderos superautos. Al alcance sólo de millonarios alrededor del mundo.

Glickenhaus flechas

1. Las ópticas carenadas fueron cuidadosamente elaborados para seguir la forma del guardabarros, similar a cualquier prototipo de competición.

2. Espejos con mucho trabajo aerodinámico, que en algunos casos son reemplazados por cámaras de visión trasera.

3. Las prominentes aberturas de los guardabarros delanteros son fundamentales para liberar calor de los frenos.

4. Techo en forma de “cúpula”, que permite una baja resistencia al viento. La carrocería está fabricada íntegramente en materiales compuestos.

5. Alerón trasero funcional, y que no queda nada mal a la vista.

6. La abertura superior sirve para refrigerar el motor, mientras que la más pequeña del zócalo hace lo propio con el sistema de frenos trasero.

7. Un toque delicado: corta el diseño de la parte inferior del paragolpes, pero también tiene su razón aerodinámica.

8. Realmente este es el gran generador de carga aerodinámica delantera. En muchos casos, el color oscuro refleja fibra de carbono.

9. Las luces diurnas son un abonado en los autos actuales, pero no en todos los superautos. Este en particular las lleva bien visibles.

10. Los bordes delanteros afilados forman al ala, que en los extremos se une con los guardabarros delanteros.

11. La punta de la nariz. Uno de los sellos personales de este auto, difícil de ver en un modelo similar. ¿Inspiración F1?

Interior

Glickenhaus  interior

18. En el interior tiene una estructura tubular extraíble que interfiere la visibilidad. Es mejor desinstalarla para uso fuera de circuito.

19. Pantallas a color para visión trasera. Infinitamente mejor que mirar los espejos.

20. Pequeños interruptores giratorios. ¿Cómo podría un interior ser más parecido al de un auto de carrera?

21. El auto dibujado podría ayudar al conductor con algún dato extra del funcionamiento, pero la información transmitida no es muy útil.

22. Al menos tiene algo de ventilación, se pueden girar y cerrar. Lo más parecido a un auto convencional.

Todos estos detalles conforman un producto excepcional. Pero para adquirir esa condición de modelo único suma otros elementos especiales.  El parabrisas usa cristal Gorilla Glass, el mismo que los smartphones. Visto desde atrás impresionan las formas. El Remate posterior con saliente pronunciada y escapes cromados. La aleta de tiburón que toca el alerón trasero en su línea central tiene un perfil excepcionalmente elegante. Líneas simples… acá no hay. Poca protección ante choques de estacionamiento.

Utilza un motor V6 Twin turbo de 3.5 litros, con 530 CV a 6.800 rpm. El chasis monocasco pesa sólo 73 kilos para lograr un peso en orden de marcha de 1.350 kilogramos.

Una obra de arte, con líneas claras y objetivos precisos, características que no pueden faltar en la producción de un cineasta que se precie de tal.

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