La historia de Arrinera comenzó en 2008 con un montón de jóvenes con la ambición de construir el primer superdeportivo de Polonia. Las cosas se pusieron serias cuando el asistente de velocidad británico Lee Noble se convirtió en miembro del consejo, ayudando a Arrinera con el diseño de un chasis a medida para un motor central de tracción trasera.
El primer prototipo de Hussarya fue equipado con un LS3 V8 sobrealimentado. Sin embargo, después de años de desarrollo, Arrinera decidió lanzar su auto de carreras GT3 antes de que la versión urbana pudiera llegar a las calles. Y para asegurarse de que los aficionados lo conocieran, se unieron al ex corredor británico Anthony Reid para que condujera el modelo en una de las series del próximo año.
Arrinera afirma que el Hussarya es más nuevo y barato que otros superdeportivos, a lo que Reid suma que es también mucho más fácil de conducir que un GT3 Ferrari o Porsche. Lo que sí es seguro es que la oferta polaca está construida según los estándares de la FIA y se vende a un precio de 229.000 dólares, con un paquete de recambios obligatorio por un adicional de 69.000 dólares.
