Ayer se presentó en el Predio Ferial de la Rural de Rosario, un nuevo Trolebus fabricado completamente en la ciudad más poblada de Santa Fe y desarrollado en conjunto por las empresas MOVI (Empresa de Movilidad de la ciudad) y ENERFE (Empresa provincial de Energías Renovables y Gas). El inédito ómnibus, denominado Bio Bus, es impulsado mediante un motor 100 por ciento eléctrico.
El vehículo cuenta con piso bajo, aire acondicionado, rampa manual, espacios para movilidad reducida y 27 ocupantes sentados. Además, posee un sistema de anticolisión, GPS, WIFI, sistema de información multimedia para los pasajero, sistema de anuncio de arribo inteligente, dos cámaras externas para ayudar a la visión del conductor y tres internas de seguridad, puertos USB en todos los asientos, entre lo más destacado.
La carrocería fue construida por la Empresa San Carlos, ubicada en la metrópoli rosarina, y el diseño fue realizado por Juan Manuel Díaz, actual diseñador de la Firma Audi, quien desde Alemania aportó los últimos detalles.
Por otro lado, el desarrollo de la ingeniería mecánica, eléctrica y electrónica del vehículo, fue realizado gracias a los aportes de los emprendedores locales de Inventu Mobility, y los motores eléctricos producidos en la Ciudad de Gálvez fueron provistos por la empresa Czerweny, con un impulsor trifásico de 380 V, 125 CV de potencia y torque de 224,3 kgm, que ayudan a proteger al medioambiente, ya que no producen emisiones contaminantes.
Con la incorporación de un nuevo vehículo para esta modalidad de transporte, Argentina entra en el ranking de los países (menos de cinco) que producen Trolebuses, y de esta manera toma mayor relevancia la propuesta, debido al desarrollo tecnológico que ayuda a mejorar a la movilidad, no sólo de Rosario, sino en diferentes urbes del país.
Por último, con respecto al impacto ambiental, tiene una notable ventaja desde el punto de vista de la motorización eléctrica ya que no emite gases tóxicos, y además la energía consumida es comprada al parque fotovoltaico de la Ciudad de San Lorenzo, provocando que tampoco haya emisión de contaminantes en la generación de la energía eléctrica que consume. Por otro lado, el micro reduce la huella de carbono ya que reutiliza un chasis de piso bajo y buena parte de la carrocería original del vehículo evitando la deposición final de toneladas de hierro.
