Competidor del EcoSport, Duster, Tracker, HR-V y Renegade, este vehículo se fabrica en Brasil con la plataforma del conocido 208.
Exteriormente luce un diseño moderno con detalles que le aportan categoría, como los cromados en el marco de las ventanas posteriores y el alerón, luces led, techo panorámico y barras de techo que asoman desde unas marcadas nervaduras dándole un toque de originalidad a su silueta. Si lo comparamos con el 208 de quien deriva, este denominado crossover por la marca mide 20 centímetros más de largo (4,16 contra 3,96 m) y es 27 centímetros más alto, pero conserva el ancho (1,74 m) y la distancia entre ejes (2,54 m). Por otro lado, según el manual, el despeje del suelo es de 20 centímetros, altura considerable para un vehículo de su segmento. El baúl del 2008 también es notablemente más grande: 355 dm3 contra 283 dm3 del 208.
Además del baúl, las diferencias en el largo y alto le proporcionan un espacio muy razonable para la cabeza y las piernas de los de atrás, aunque el del medio no irá tan cómodo. Como es de esperarse, todos tienen cinturones de tres puntos y apoyacabezas, aunque curiosamente carecen de anclajes Isofix, algo que sí ofrece la versión europea. Adelante, el espacio es apropiado y se destaca por unas butacas con pétalos bien marcados que aseguran una buena sujeción. Para el conductor aplica la fórmula del 208 en cuanto al concepto I-Cockpit, cuya característica principal es la posición del tablero de instrumentos por encima del volante (ubicación que supone mayor atención al no necesitar desviar la vista demasiado del parabrisas), además de contar con un volante más chico y asimétrico para facilitar el ingreso. Su butaca (con tapizado de cuero y tela, como el resto) se regula en altura y el volante lo hace también en profundidad. Salvo el muy ancho pomo de la palanca de cambios y la inusual forma del freno de mano, el resto de los comandos nos recuerdan al 208. Si bien tiene sensores de estacionamiento, la visibilidad trasera a través de la luneta es bastante reducida.
Esta motorización 1.6 THP de 165 CV que manejamos y equipará a las versiones tope de gama que descontamos que llegarán a nuestro país le otorgará al 2008 el privilegio de ser el más potente del mercado, posicionándose como el modelo con las mejores prestaciones de la franja. Entrega un torque de 24,5 kgm, a partir de las 1.750 vueltas. Eso se refleja en los números que alcanzamos a probar, estableciendo una velocidad máxima de 205,2 km/h (a 5.100 vueltas) y acelerando de 0 a 100 km/h en apenas 9,2 segundos. La elasticidad también es destacada, registrando con nuestro Racelogic un tiempo de 7,5 segundos para llegar en cuarta a los 120 km/h partiendo de los 80 km/h. En términos de consumo, el 2008, cuya caja de sexta le permite viajar a 130 km/h a 3.000 vueltas, marcó 10,3 km/l en ciudad, en tanto a 90 km/h registró 18 km/l y a 120 km/h llegó a los 13,8 km/l. Además de la sexta, la caja se caracteriza por un reglaje bien coordinado y pasos de marcha que no demandan demasiado trabajo.
A pesar de su altura, que lo lleva a tener un centro de gravedad más elevado, la tenida en ruta es muy buena, haciéndonos olvidar por momentos que estamos sobre un SUV. Al mismo tiempo, el confort de marcha en ciudad es adecuado para este tipo de vehículos. Cuenta con ESP, que forma parte del Grip Control (similar al del 3008), que actúa sobre el torque que recibe cada rueda delantera, mediante los modos Standard, Snow (nieve, que funciona hasta los 50 km/h), All-Terrain (todo terreno), Sand (arena, que se trabaja hasta los 120 km/h) o ESP desconectado. Tuvimos la oportunidad de probar varios de ellos (sobre todo, el de arena y el todo terreno), con la conclusión de haber contado con un sistema eficaz y seguro. Siguiendo con la seguridad, cabe resaltar los discos en las cuatro ruedas, los seis airbags y los rompeniebla delanteros (también hacen de luz de curva o “cornering”) y atrás. El frenado lo realiza de manera firme y bien derecho, fijando una distancia de 41,6 metros para la detención a cero desde los 100 km/h. Otro ítem a destacar es el de la dirección eléctrica, que brinda muy buena asistencia en todo momento.
La dotación de confort es muy completa, comenzando por el gran techo panorámico y la pantalla táctil de siete pulgadas con kit manos libres, reproducción de audio AM, FM, MP3, auxiliar, USB, visualización de fotografías y audio streaming vía bluetooth, tanto para música como para telefonía. Además cuenta con regulador y limitador de velocidad, climatizador automático bizona, computadora de a bordo, cierre central con control remoto, cuatro levantavidrios, sensores de estacionamiento adelante y atrás, pedalera deportiva de aluminio, respaldos abatibles 60/40, sensor automático de luces y detector de lluvia, entre otras cosas. Entre los debes anotamos la rueda de auxilio temporal y, en menor medida, la ausencia de luces de lectura individuales, espejo interior fotocromático, manija en el techo para el acompañante y lector de CD.
Este modelo que nos llegará de la planta de Porto Real, muestra muy pocas diferencias con el que se produce y comercializa con mucho éxito en Europa, donde tampoco existen versiones 4x4. Como apuntamos al principio, aquí lo esperan, en sus versiones full, rivales de la talla del Ford EcoSport y Renault Duster, ambos de 143 CV, y Honda HR-V y Chevrolet Tracker, los dos de 140 CV.
PRESTACIONES
Velocidad máxima 205,2 km/h
Acel. 0 a 100 km/h 9,2 s
Consumo promedio 14 km/l
VERSIONES Y PRECIO
Active (1.6 de 115 CV) Manual $ 316.600
Allure Manual $ 342.600
Allure Tiptronic $ 358.500
Feline Manual $ 373.000
Sport (1.6 THP 163 CV) Manual $ 417.200
