Poco a poco, varias marcas comienzan a armar su cronograma de cara a los próximos años y entre los detalles más importantes se destaca la inversión en sistemas electrificados, tecnologías que estarán cada vez más presentes en diferentes modelos.
En línea con estos proyectos, Markus Duesmann, CEO de Audi, aprovechó la conferencia de Berlín acerca del clima para hablar acerca de la transición acelerada hacia la electromovilidad.
Entre los detalles más importantes, el directivo reveló que la producción del último modelo de la marca alemana con motor a combustión interna iniciará su producción en 2026, ya que la compañía se prepara para ofrecer una gama exclusivamente impulsada por electricidad.
La transición de la firma de los cuatro anillos hacia los sistemas electrificados será cada vez más fuerte. De esta manera, se eliminará de forma gradual la fabricación de motores a combustión teniendo en cuenta que 2033 será la fecha límite. La idea de Audi es alcanzar un nivel de cero emisiones netas como muy tarde en 2050.
Más allá de que el final de los propulsores con emisiones contaminantes se daría en 12 años, la compañía espera que la demanda continúe en China, donde se seguirían ofreciendo modelos con impulsores a combustión producidos localmente en el país asiático.
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