El Programa de Evaluación de Vehículos Nuevos para América Latina y el Caribe, Latin NCAP, publicó hoy la novena y última ronda de resultados del año 2025. Estos informes muestran una reacción importante por parte de Suzuki tras la evaluación inicial del Baleno y la consolidación de Kia como referente en protección.
Estos son los últimos resultados antes de que en 2026 entre en vigencia un protocolo de evaluación mucho más exigente.
El Suzuki Baleno, fabricado en India, tuvo un paso doble por las pruebas de choque. En una primera instancia, la versión con solo dos bolsas de aire obtuvo apenas una estrella. El auto mostró una estructura estable, pero la protección para el pecho del adulto en el impacto lateral fue calificada como débil. Además, la falta de tecnologías de asistencia a la conducción (ADAS) y de protección lateral para la cabeza penalizaron fuertemente el puntaje.
Tras estos resultados, Suzuki decidió mejorar el equipamiento básico del modelo para toda la región, incorporando bolsas de aire laterales de cuerpo y de cortina de serie. El Suzuki Baleno actualizado con seis bolsas de aire fue evaluado nuevamente y logró subir a dos estrellas. Si bien la protección de la cabeza mejoró a buena, el modelo no alcanzó una nota más alta debido a la falta de un limitador de velocidad estándar y de frenado autónomo de emergencia.
El Kia Sportage, producido en Eslovaquia, Corea del Sur y Estados Unidos, alcanzó las cinco estrellas. Este modelo, que ya había sido evaluado en años anteriores, fue actualizado por el fabricante para incluir seis bolsas de aire de serie, aviso de cinturones de seguridad traseros, anclajes i-Size y una mayor disponibilidad de tecnologías ADAS.
En las pruebas de 2025, el Sportage demostró un desempeño sobresaliente en todas las categorías:
- Ocupante Adulto: 89,81 por ciento
- Ocupante Infantil: 91,84 por ciento
- Protección a Peatones: 70,93 por ciento
- Asistencia a la Seguridad: 98,22 por ciento
Alejandro Furas, Secretario General de Latin NCAP, felicitó a Kia por lograr su cuarto modelo de cinco estrellas en menos de dos años, destacando el cambio de política de la compañía.
Al mismo tiempo, los directivos del organismo insistieron en la necesidad urgente de implementar un etiquetado de seguridad vehicular obligatorio en la región. Esto permitiría que los consumidores sepan, antes de comprar, cuántas estrellas de seguridad tiene el vehículo, fomentando una competencia basada en la protección de la vida y no solo en el precio.
