¿Cómo se relacionarán dentro de 15 años conductor y vehículo? Esa es la pregunta que este año trata de responder el LA Design Challenge. La creativa competición vinculada al Salón del Automóvil de Los Angeles tiene lugar desde hace diez años entre los estudios de diseño de los fabricantes.
La mayoría de propuestas son pura ciencia ficción y no realizables, al menos hasta 2029. Así, por ejemplo, Infiniti maneja la idea de conectar al conductor con el vehículo a través de su sistema nervioso.
No va tan lejos la firma Peterbilt, que tiene el interior del auto en forma de un lounge con asientos reclinables y posibilidades de entretenimiento, siguiendo así con la proyección del vehículo autónomo.
La competición no tiene en cuenta si estas visiones son técnicamente realizables. Lo que importa no son vehículos terminados sino sólo bocetos sobre papel y su correspondiente historia.
FUENTE: dpa