En Europa, estos motores se estrenan en el Scénic y en el Grand Scénic, con 115, 140 y 160 caballos. Se combinan con cambio manual de seis marchas o automatizado de doble embrague con siete relaciones.
Sólo el torque de la versión de 140 CV fue divulgado: son 24,5 kgm (el mismo par del 1.6 THP de PSA Peugeot Citroën) disponibles entre 1.500 y 3.500 rpm.
En países de nuestra región (Brasil, por ejemplo), Renault podría utilizar este propulsor 1.3 Energy TCe para reemplazar el viejo 2.0 aspirado de Captur, Duster y Oroch. Adaptado para las necesidades del país hermano, es decir, para quemar nafta y alcohol, podrá tener potencia de hasta 170 CV. Las versiones con menos potencia todavía pueden llegar a Sandero, Logan y los Nissan Kicks, March y Versa.
También podrían utilizarlo unidades Mercedes-Benz, empresa que fue socia en el desarrollo.
Este propulsor se vale de innovaciones desarrolladas por la alianza, como el Bore Spray Coating, la misma tecnología de revestimiento de cilindros utilizada en el motor seis cilindros del Nissan GT-R, para reducir la fricción y optimizar la transferencia de calor.
El 1.3 turbo también cuenta con mayor presión en la línea de combustible de la inyección directa, de 250 bar, que mejora la pulverización del combustible en la cámara de combustión, que a su vez tiene un diseño más eficiente. Este motor también cuenta con doble mando de válvulas variable.
Renault afirma que su nueva central de fuerza ofrece más torque en bajas revoluciones y tiene una fuerza más lineal regímenes altos lo que aumenta el confort de conducción.