Hace mucho que Mercedes-Benz viene haciendo ruido con su pick-up. La marca alemana una vez más llamó la atención del público cuando a mediados de 2014 empezaron a circular los rumores que aseguraban que la casa de Stuttgart estaba trabajando en una camioneta mediana con capacidad de carga de una tonelada. Y cobraron fuerza a partir de la aparición en la web de teaser elaborados por los estudios e diseño que, casi siempre, muestran imágenes muy cercanas al producto definitivo.
En octubre de 2016 el espacio para las dudas se achicó cuando Mercedes hizo el primer anuncio oficial. Fue en Estocolmo, Suecia, con la presentación de los Concept X, dos unidades conceptuales de la pick-up con las cuales, además, daba a conocer el nombre del producto: Clase X.
Ocho meses después, cuando los Concept X todavía están en el recuerdo de quiénes visitaron el Salón de Buenos Aires, Mercedes-Benz ya tiene lista la versión de serie y nos invitó a conocerla unos meses antes del lanzamiento comercial.
Para muy pocos
El evento tuvo condimentos especiales. El primero, que fueron invitados solo dos medios de cada uno de los pocos países convocados (Alemania, Argentina, Brasil y Sudáfrica). Compartí ese honor con Carlos Figueras, director de Auto Test.
El segundo, la estricta confidencialidad solicitada por los organizadores, los cuales nos permitieron ser parte del evento solo firmando un compromiso de embargo y anulando con un sticker la cámara de nuestro celular. Y el tercero, el lugar elegido para el evento: una antigua base militar en Münsingen, actualmente inactiva (forma parte de una reserva natural), aunque utilizada en su momento para probar tanques.
Conociendo a la Clase X
Antes de conocer el producto definitivo asistimos a tres workshop, cada uno con una temática específica y a cargo del principal responsable del área correspondiente: Dr. Stephan Mengel, jefe de Ingeniería, Kai Sieber, del área de Diseño, y Christian Pohl, responsable de Producto y Marketing, describieron en detalle a la Clase X, desmenuzando cada versión, motorización y equipamiento, información que no podemos compartir por aquello del acuerdo de confidencialidad que mencionamos más arriba.
Una vez que los workshops finalizaron, corrieron la lona que ocultaba a la unidad que estaba expuesta en el salón y finalmente pudimos ver por primera vez a la novísima pick-up de Mercedes-Benz.
Por supuesto, su aspecto tiene bastante del Concept X, aunque con las lógicas diferencias, incluso en el interior, decoración que variará seguramente con el equipamiento de cada versión.
Primera impresión cómo copiloto
El punto de máximo placer de la jornada llegó al finalizar las mesas de trabajo. Una combi nos trasladó hasta un puesto donde nos esperaban dos unidades de la Clase X (camufladas) en las cuales tomamos ubicación (Figueras en una, yo en otra) en la butaca del acompañante.
Fue un recorrido corto que combinó tramos de off-road (de mediana complejidad con trepadas pronunciadas, descensos exigentes y terrenos muy accidentados), con un largo tendido asfáltico, circuito que nos permitió vivir una primera impresión, brevísima pero satisfactoria de esta pick-up con futuro nacional.