El ingeniero Robert S. Hubbard, nacido en 1945 en los Estados Unidos, es el inventor del cuello protector cervical denominado HANS (por Head and Neck Support Device), es decir dispositivo de soporte para la cabeza y el cuello), integrado con el casco, para los pilotos de automóviles de carreras.
Hubbard se graduó con honores como ingeniero mecánico en la Universidad de Harvard, y trabajó en la década de 1970 en la división de seguridad en los accidentes de General Motors en la especialidad de crash tests y ensayos con dummies (maniquíes). Posteriormente comenzó su desempeño en el Laboratorio de Investigaciones y Ensayos de Biomecánica en la Universidad estatal de Chicago, donde recibió el doctorado.
Hubbard quedó muy dolorido al enterarse de la muerte de Patrick K. Jacquemart, un piloto francés que era su amigo y que falleció el 9 de julio de 1981 en el circuito de Ohio a bordo de un Renault 5 Turbo Alpine del equipo oficial de Renault Sport. Por este luctuoso hecho se puso a trabajar en un sistema de protección especial para los pilotos.
Hacia mediados de 1980 Hubbard presentó el HANS. A partir de entonces es mucho más pequeño, liviano (pesa entre 500 y 600 gramos) y se ajusta a un gran espectro de pilotos y habitáculos. El HANS utiliza un sistema de yugo con otro de sujeción con unos broches en el casco y un cuello hecho de kevlar, fibra de vidrio y fibra de carbón. El casco se sujeta al HANS para restringir el movimiento de la cabeza hacia adelante y hacia ambos lados, reduciendo de esta forma las cargas sobre el cuello en aceleraciones violentas. Cabe aclarar que todo el sistema va sujeto por los cinturones de seguridad que se colocan por arriba del dispositivo, cuyo empleo es obligatorio para todos los eventos que entren en el calendario deportivo internacional de la FIA (Federación Internacional del Automóvil).
Una de las primeras personas que no son pilotos profesionales en comprobar la eficacia del HANS fue el gobernador Mike Easley de Carolina del Norte. En el año 2003 el gobernador estaba compitiendo en una carrera a beneficio, cuando perdió el control de su vehículo impactando contra un muro a 200 km/h: salió ileso del accidente y apenas una hora más tarde volvió a subirse a otro automóvil. Este hecho figura en todas las enciclopedias de automovilismo actualizadas.
Cabe aclarar que Hubbard desarrolló el HANS junto con Jim Downing, empresario automotriz y piloto de carreras, con la finalidad de reducir la probabilidad de una lesión craneal y cervical severa causada por el movimiento violento durante la aceleración o desaceleración, así como las cargas de fuerza transmitidas al cuello en forma secundaria (el llamado “efecto látigo”). Otra utilidad del HANS es evitar que la cabeza golpee con los bordes del cockpit en caso de impacto lateral. En un estudio realizado por el centro de investigaciones CESVI, se menciona que el trauma es una lesión que afecta al cuerpo por una fuerza externa aplicada de manera súbita y violenta, y que el HANS reduce en un 80 por ciento la fuerza de proyección de la cabeza hacia adelante durante un impacto frontal y disminuye en un 13 por ciento las fuerzas transmitidas hacia la cabeza.
El doctor Hubbard ha recibido muchos reconocimientos por sus aportes a la seguridad de los pilotos y por contribuir con su invento a salvar muchas vidas. Uno de los homenajes más significativos se le tributó recientemente en la sede la SAE ( Sociedad de Ingenieros en Automotores de los Estados Unidos) en Detroit, con ocasión de un congreso internacional de ingeniería del automóvil.
En 1991 Hubbard fundó la empresa Hubbard-Downing Inc. que se encarga del desarrollo, fabricación, producción y venta del dispositivo HANS. En la actualidad el citado profesional sigue estudiando y llevando a cabo intensos trabajos de investigación para concebir sistemas de seguridad pasiva más eficaces para los automóviles y otros tipos de vehículos.
