Hace poco más de un año, Parabrisas anticipaba el mapa de los autos ecológicos en Argentina y adelantaba que el Gobierno planificaba modificar el esquema impositivo de estos vehículos, algo reclamado por las terminales. Hoy, finalmente, llegó el esperado decreto presidencial que baja o elimina los aranceles aduaneros.
El Boletín Oficial publica el decreto 331/2017 en el que “se considera adecuado reducir transitoriamente los derechos de importación extrazona” de los vehículos ecológicos (eléctricos, híbridos y a hidrógeno) por un plazo de tres años y con una cantidad limitada de seis mil unidades.
La intención del Gobierno es favorecer a la industria local, y por lo tanto, la rebaja será mayor para aquellos autos que vengan desmontados parcial o completamente e impliquen un proceso en la Argentina. Es que el decreto afecta únicamente a las empresas radicadas en el país.
A partir del nuevo régimen, que derriba el gravamen del 35 por ciento que pagan los autos que llegan desde el exterior, los vehículos híbridos, con una capacidad de carga de hasta 1,5 toneladas, que lleguen completamente armados, pagarán un 5 por ciento de arancel. Asimismo, baja hasta un 2 por ciento para aquellos modelos con motor eléctrico o a hidrógeno con el mismo origen y tara.
La quita total del impuesto será para los modelos que arriben semi y totalmente desarmados. Es decir, que favorezcan al desarrollo de la industria local y generen puestos de trabajo.
Quedan exentos los vehículos de menos de 400 kilogramos de peso o 550 kilos de carga, con motor de 15 kW de potencia o autonomía de 80 kilómetros. Este apartado deja afuera a los pequeños city cars eléctricos como los nacionales Sero Electric o los próximos a presentarse en el país, los chinos Kandi Coco. Este medio de transporte todavía no está autorizado a circular en la Ciudad de Buenos Aires, pero su permiso llegará pronto luego de la experiencia lograda en diferentes sectores del Conurbano.
Industria nacional
La gran incógnita es saber en qué estado está la industria nacional. Parabrisas consultó a diferentes terminales asentadas en Argentina y con recientes inversiones para promover sus plantas locales. Tanto Toyota, como Chevrolet y Nissan descartaron por el momento la producción local de este tipo de unidades. En el grupo Peugeot-Citroën fueron ligeramente más alentadores y comentaron que la decisión está en etapa de análisis.
Renault, por su parte, tiene en carpeta el lanzamiento del Kagoo Z.E en el corto plazo.
La otra gran arista de esta historia es la técnica representada por el INTI, encargado de homologar los vehículos que ingresan al país. Desde el Departamento de Regulación Automotriz confiaron a este medio que no han habilitado ningún rodado nuevo pero tampoco recibieron nuevos pedidos.
No obstante, aclararon que a pesar de esto, los autos que ingresen podrán circular ya que se tomará la normativa vigente desde 1995. “Luego les exigiremos como agregados ciertas disposiciones europeas. Emitimos un dictamen técnico y define la Secretaría de Industria”, apuntaron las fuentes del INTI.
Esta medida constituye una primera instancia a favor de un área caliente de la economía argentina como es el sector automotor, tanto por el consumo como por los puestos de trabajo generados. Algunas versiones indican que la intención oficial es reelaborar el esquema impositivo y así poder reactivar el mercado.
A su vez, el énfasis hacia un parque automotor más ecológico y que cuida el medio ambiente está marcado por la decisión de YPF de abrir más de cien puntos de carga eléctrica en todo el país. El día de su asunción, Mauricio Macri transitó con una VW Touareg híbrida, en una clara señal de su deseo por apoyar estos vehículos.
