En una industria tan competitiva como lo es la automotriz, la creatividad no escasea y los ingenieros demostraron que no solo hay una forma de transmitir la potencia del motor al piso.
Muchos son los sistemas de transmisión y aquí te decimos cuales son los pros y los contras de cada uno de ellos:
Robotizada
Empezando por el más económico de los sistemas y en franco deceso, nos encontramos con este tipo de transmisión que nunca se mostró del todo agradable. Consiste básicamente en una caja manual, que comandada por una centralita y distintos accionadores realiza los cambios de forma autónoma. Es una buena opción para quien nunca dispuso de un cambio automático, pero si el usuario ya utilizo una caja “tradicional” con convertidor de par, esta le resultará incomoda y poco efectiva.
CVT
Esta caja, también conocida como “de variador continuo”, fue presentada por Nissan hace casi veinte años y poco a poco la fue introduciendo en prácticamente todos sus modelos.
Consta de un sistema en el cual no existen los cambios propiamente dichos, sino que la relación de transmisión va fluctuando de manera imperceptible, manteniendo siempre al motor en su rango de funcionamiento más eficiente (la zona de toque máximo).
Es excelente para quien no busque la deportividad sino confort. Vale aclarar que ya es una tecnología de la cual gozan otras marcas (no es exclusiva de Nissan).
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Convertidor de par
Es el sistema más antiguo y es conocido como “embrague hidráulico”. Se considera como la opción más tradicional y fiable dentro del mercado.
Utiliza fluidos bajo presión para transmitir la energía del motor.
En los últimos años este tipo de transmisiones parecían mostrar fecha de retiro, pero gracias a los esfuerzos de distintas marcas (en particular ZF), está má vigente que nunca, retomando puestos en el mercado que ya se consideraban perdidos.
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Doble embrague
Definitivamente la más compleja y elaborada de las posibilidades que podemos encontrar hoy. Se caracteriza por hacer los cambios de marcha muy rápidamente y generalmente de forma imperceptible.
Su desarrollo fue particularmente impulsado por el Grupo VW, que la denomina DSG por sus siglas en ingles Direct Shift Gearbox. Otras marcas también utilizan este sistema, pero no lograron el éxito que tuvo el grupo VAG.
Para explicarla a grandes rasgos se podría decir que está compuesta por dos cajas con dos embragues. Una se encarga de los cambios pares y otra de los cambios impares.
Ejemplo: Cuando la tercera marcha está en funcionamiento, la cuarta ya está pre-engranda, esperando a que el ordenador o el piloto de la orden para pasar a ella.
Es definitivamente la más efectiva, aunque también se le atribuyen problemas de confiabilidad.
