Muchas veces volver al ruedo no es imposible, y por más que muchas marcas quedaron en el olvido a través de los años, otras tienen una segunda oportunidad. Ese es el caso de Borgward, una marca alemana que comenzó produciendo pequeños vehículos de trabajo en 1924. Innovadora, versátil y con una gran capacidad llegó a producir durante su historia, entre otras cosas, hasta barcos y helicópteros.
Pero los autos fueron los que se llevaron el mayor éxito y fama en sus mejores épocas. El grupo tuvo marcas como Hansa, Goliath y Lloyd, que se sumaron a los homónimos Borgward, que eran los de mayor precio. Con esa marca, en 1954 se presentó un modelo que marcó una bisagra, el Isabella. Fue un vehículo de avanzada y de gran calidad, con suspensión independiente en el eje trasero que además tenía que impulsar a las ruedas, algo poco visto hasta ese momento.
El Isabella fue también producido en la Argentina por la empresa Dinborg, que estaba radicada en la provincia de Córdoba. Lo produjo bajo licencia desde 1959. Pero aún cuando la producción no había llegado a los mil ejemplares, a mediados del año 1961, la firma alemana presentó la quiebra, y tanto los sueños del grupo a nivel mundial como así también los de la filial argentina quedaron truncos.
Desde ese año la empresa dejó de existir, pero 2015 es el año del resurgimiento: en el Salón de Frankfurt la marca volvió al ruedo. El encargado de llevar adelante tal esperanzadora acción es Christian Borgward, el nieto del antiguo dueño y fundador de la marca que llevaría su apellido durante cuatro décadas: Carl Borgward. Para este regreso, el principal accionista es una empresa china llamada Foton, dedicada en la actualidad a la fabricación de vehículos comerciales.
El BX7 será el primer vehículo de la renovada marca. Es un SUV mediano, de 4,70 metros de largo, que intentará competir con el Audi Q5 (modelo que además usa de referencia), Volvo XC 60 y Porsche Macan, entre otros. Todavía hay poca información, pero se conoce que el motor desarrolla unos 220 caballos de fuerza gracias a un turbo, posee tracción integral y caja de doble embrague, con siete marchas. Sin embargo, una variante híbrida plug-in se avecina, y hasta sería capaz de desarrollar 400 CV con unos 50 kilómetros de autonomía en modo puramente eléctrico.
Los prototipos del BX7 ya fueron descubiertos probando diversos caminos europeos y hasta la pista de Nürburgring. Foton se focalizará desde un principio en el mercado chino, pero la estrategia sería arribar a mercados europeos en un par de años.
Según planean, los modelos de la marca tendrán gran nivel, con precios que la emparejarían al mundo Premium, valorando la practicidad del uso diario y familiar, con gran tecnología y sistemas actuales de conectividad en pos de los consumidores. Por el momento esperan ir presentando dos modelos nuevos por año, para ir cubriendo la mayor cantidad de segmentos posibles. Seguramente en el próximo tiempo se dará a conocer más información acerca de futuras estrategias y novedades. Lo bueno es que Borgward ya es una realidad.
