Así probábamos el Renault Gordini

Recordamos al clásico modelo del rombo. En esta ocasión, la prueba de manejo corresponde a la edición de mayo de 1963 de Revista Parabrisas. Galería de fotos

Redacción Parabrisas

La nueva versión del Dauphine, ahora llamado Gordini, con motor mas potente y caja de cuatro marchas.

El Gordini de Renault es una versión corregida y aumentada en sus aptitudes automovilísticas del modelo Dauphine. Las diferencias entre uno y otro automóvil radican sustancialmente en la parte mecánica y transmisión. Los detalles de carrocería están en este caso algo mejorados, aunque sin perder el sentido del modelo de origen. Luego, lo que expresamos oportunamente para el modelo Dauphine, en cuestión carrocería y detalles generales puede aplicarse en el caso del Gordini.

La terminación en general de detalles de carrocería es buena, comprobándose la ausencia de esos pequeños defectos de tapicería que aparecen en algunas marcas de producción nacional.

El interior del automóvil esta bien tapizado, y los asientos tienen un nuevo diseño con respecto a los del Dauphine que los hace mas cómodos y confortables, cosa que se nota en viajes de larga distancia y duración.

Cuando la revista PARABRISAS recibió el automóvil para Road Test, lo hizo con el comprensible interés de aquellas personas que han probado un automóvil y se les ofrece una nueva y mas poderosa versión del mismo.

El nombre Gordini esta ubicado sobre el costado derecho del automóvil y junto con una bagueta de color distinto al de la carrocería, que corre sobre los lados del auto, diferencia este automóvil de su predecesor, el Renault Dauphine. No hay otro detalle exterior que sirva para diferenciar ambos automóviles entre si.

Renault Gordini

Las condiciones de comodidad del piloto son satisfactorias. Si el individuo que maneja no es exageradamente alto puede hacerlo con toda comodidad, aun contando con el espacio disponible para los pedales, que es algo restringido, por encontrarse a la misma altura que los faldones interiores de las ruedas delanteras. 

El "tacto" -llamémoslo así- de los tres pedales es suave y progresivo, sin saltos ni endurecimientos bruscos, sean estos calculados o no. El tamaño del apoyapié de los pedales también es reducido, pero la practica de encontrarlos en un momento de apuro se adquiere a los pocos kilómetros de manejar el automóvil. La posición del volante es correcta y este tiene una inclinación suficientemente deportiva como para que al manejarlo sea una sensación agradable

La misma textura del volante, fino y con un moleteado antideslizante contribuye en mucho a esa sensación deportiva que se trasluce en general en todo el automóvil.

Renault Gordini

Los controles tanto visuales como manuales, están al alcance cómodo del conductor, y el tablero, simple y sin perillas hace que el mecanismo de puesta en marcha sea una operación sencilla. El Gordini, como su antecesora la Dauphine, trae un sistema de arranque en frío, cebador automático que, además de eliminar una perilla del tablero, funciono bien en el automóvil probado, mejor en las mañanas frías que cuando el día era caluroso y el motor estaba caliente.

Las circunstancias en que se desarrollo la prueba en ruta del automóvil no fueron fáciles. Durante el viaje, cuatro mil kilómetros, el tiempo fue muy caluroso. la aguja indicadora de temperatura siempre estuvo en la región verde; pero mas cerca de la punta caliente que de la fría.

Cuando la velocidad descendía de los 115 - 120 de marcha o crucero a los mas o menos 90 kilómetros por hora, durante un corto lapso la temperatura descendía sensiblemente y la aguja ubica base en el centro de la zona verde. El conductor no debe preocuparse de todos modos por que la aguja se interne uno o dos milímetros en la zona roja, ya que a esa altura todavía se encuentra dentro de la temperatura normal de funcionamiento que oscila entre los ochenta y cinco y noventa grados centígrados.

De todos modos, la performance del Gordini es muy buena en cuanto se refiere a velocidad tope, que fue de 130,4 Km/h. y la posible velocidad de crucero anteriormente nombrada.

Renault Gordini

Impresiones de manejo

El Gordini es un automóvil ágil y dinámico en la ciudad. La tan mentada caja de cuatro velocidades que pedimos en su oportunidad para el Dauphine le otorga ese gusto deportivo y "entrador" tan difícil de definir cuando se aplica a automóviles cuya concepción no es deportiva sino utilitaria. La palanca del cambio de velocidades ubicada en el piso entre ambos asientos delanteros es liviana de accionar y acompaña sin esfuerzos el movimiento efectuado por el conductor; pero su posición en los diferentes puntos de las marchas y en el punto muerto es algo incierta. 

Para conductores que gustan de manejar con los brazos estirados, lejos del volante (caso PARABRISAS), la pasada de tercera a cuarta, y mas notablemente de la cuarta a tercera, no puede hacerse sin acercar el cuerpo al volante. Esta circunstancia desaparece por descontado para los que manejan mas cerca del volante pero la corrección de ese modo de manejar es relativa.

El Gordini goza de un neto y bien definido sobreviraje u "oversteer", que traducido al lenguaje común y corriente significa que es sensiblemente coleador. En curvas abiertas y veloces, esta característica del vehículo no influye mayormente en la conducción; ya que es perfectamente controlable.

Renault Gordini

En curvas cerradas y muy veloces el conductor novel de Gordini debe tomar las cosas con calma, hasta acostumbrarse a este tipo de vehículo con mas peso sobre el tren trasero.

El sobreviraje le quita en cierto sentido estabilidad longitudinal, lo que se nota al andar ligero por asfalto con "olas" o cuando un golpe de viento le da de costado. Con vientos laterales fuertes o arrachados, la estabilidad longitudinal se resiente en una grado algo mayor.

Gran parte del viaje del Test fue realizado por caminos de tierra y ripio. En caminos sin pozos no importa la huella o el colchón de tierra; el Gordini se maneja perfectamente, aunque el cuidado que debe tenerse en las maniobras de volante y freno debe ser mayor que en el asfalto. Lo mismo vale para la lluvia. Para estos casos extremos de conducción conviene usar sin miedo la caja de velocidades y sobre todo tomar curvas en una marcha que tenga potencia y salida y que dependa del tipo de curva y la velocidad del vehículo.

La distribución de la caja de velocidades esta muy bien lograda. El escalonamiento de las marchas progresivas no deja espacios en claro, ni zonas de rpm con caída de potencia.

En el caso Gordini, que cuenta con 35.5 HP por norma equivalente a DIN o sea 40 HP por la mas usual y corriente norma SAE la caja de velocidades constituye el mejor elemento con que cuenta el conductor para el manejo, tanto en ciudad como en ruta. El motor es elástico, esto es, puede levantar revoluciones desde muy abajo, pero esta característica que contribuye a la suavidad de marcha no debe tomarse como norma de manejo.

La caja debe usarse con toda la frecuencia necesaria, no solamente como ayuda a la vida útil del motor sino para no recibir sorpresas desagradables con otros automóviles de reconocida performance menor. La potencia máxima del motor Gordini se obtiene a 4500 rpm. Lo ideal en una competición seria conservarse alrededor de esa cifra constantemente.

Renault Gordini

En el manejo normal, tanto en ruta como en ciudad, eso no es necesario; pero hay que tener cuidado en no caer en el otro extremo y pretender andar en cuarta acelerando cuando la marcha que corresponde es la segunda o la tercera. Para obtener una buena aceleración, la primera debe llevarse hasta los 30 Km/h; la segunda hasta los 50 y la tercera hasta los 85. Evidentemente el automóvil da mas en cada marcha, pero llegara hasta los limites máximos significa la perdida de la aceleración.

Viajando dos personas solamente conviene poner el equipaje en el baúl, situado adelante y no en el asiento trasero.

La razón es que añade peso adelante, que sirve tanto en la estabilidad longitudinal como en las frenadas. En resumen, el Gordini es un deportivo automóvil de cuatro puertas y merece como tal un manejo deportivo y consciente por parte del dueño. El motor es rendidor, pero no debe forzársele sin necesidad. La caja esta para ser usada, para llevar con cada velocidad del automóvil el numero de revoluciones conveniente en el motor.

El empleo correcto de la caja destaca las características y las performances del automóvil, ubicándolo de acuerdo con su manejo, entre los primeros de su categoría.

Otros datos

Motor: 0.8 con cuatro cilindros en línea y 35,5 CV

Transmisión: Manual de cuatro marchas

Velocidad máxima: 130,4 km/h

Aceleración 0-100 km/h: 24 segundos

Distancia de frenado a 100 km/h: 56,7 metros

Consumo en ruta a 80 km/h: 16,4 km/l

Consumo en ciudad: 12,4 km/l

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