Un episodio tan breve como inquietante puso en el centro de la escena a Viry-Châtillon, la localidad donde se encuentra la base operativa de Alpine. Dos personas ingresaron de manera ilegal al edificio del equipo francés el lunes por la noche, en una acción que, pese a no dejar robos ni daños importantes, abrió un abanico de interrogantes dentro del mundo de la Fórmula 1.
Una irrupción rápida y precisa
El incidente ocurrió cerca de las 22:00 horas, cuando los intrusos rompieron una ventana del hall de entrada y se dirigieron directamente hacia el sector donde trabajan los directivos y responsables técnicos del equipo. Las primeras pericias indican que varias puertas fueron forzadas durante el recorrido, señal de que revisaron diversos espacios antes de retirarse.
La secuencia completa habría durado apenas unos minutos. Testigos consultados por la prensa francesa señalaron que los individuos abandonaron el edificio casi inmediatamente después de entrar, lo que hace pensar en un objetivo muy concreto.
Ningún objeto faltante, el dato que más inquieta
A pesar del acceso violento, el inventario quedó intacto. Ni documentación, ni computadoras, ni herramientas técnicas fueron sustraídas. “No se llevaron nada. Todo está bien. No había empleados presentes en ese momento”, aseguraron fuentes cercanas a Alpine.
Paradójicamente, esa misma ausencia de robos despertó la principal preocupación: si no buscaban objetos, ¿qué estaban intentando encontrar? En la Fórmula 1, donde cada avance tecnológico puede significar décimas decisivas, el fantasma del espionaje industrial surgió de inmediato entre las posibles explicaciones.
Investigación en marcha y múltiples hipótesis
La División de Delitos Territoriales quedó a cargo del caso y ya inició el análisis de huellas y registros de seguridad para reconstruir el ingreso. Al estar descartada la motivación económica, los investigadores no excluyen que se trate de un intento de obtener información sensible del equipo.
Por ahora no hay sospechosos identificados y el episodio sigue bajo investigación. Lo que sí dejó al descubierto este extraño ingreso es que la seguridad de los equipos de Fórmula 1, por exhaustiva que sea, puede quedar expuesta ante acciones rápidas y planificadas que podrían esconder intereses mucho más profundos.
