Autobuses de hidrógeno: Toyota e Isuzu avanzan hacia la movilidad cero emisiones

El proyecto combina la experiencia de Isuzu en autobuses eléctricos con la tecnología de pila de combustible de Toyota.

Redacción Parabrisas

Toyota e Isuzu han dado un nuevo paso en la transición hacia la movilidad sostenible al firmar un acuerdo estratégico para el desarrollo conjunto de autobuses de pila de combustible de hidrógeno (FCEV). 

La producción de estos vehículos comenzará entre abril de 2026 y marzo de 2027 en la planta de J-Bus, ubicada en la ciudad japonesa de Utsunomiya, en la prefectura de Tochigi.

El proyecto tomará como base el autobús eléctrico de batería diseñado por Isuzu y producido por J-Bus —empresa conjunta entre Isuzu y Hino Motors—, lanzado en 2024. Este modelo será adaptado con un sistema de pila de combustible de hidrógeno desarrollado por Toyota, con el objetivo de reducir las emisiones de CO₂ y avanzar hacia la neutralidad en carbono. 

La alianza busca además abaratar costos mediante la estandarización de componentes entre vehículos eléctricos a batería (BEV) y eléctricos de pila de combustible (FCEV).

Autobuses de hidrógeno: Toyota e Isuzu avanzan hacia la movilidad cero emisiones

La colaboración entre Isuzu y Hino en el segmento de autobuses se remonta a 2002, y este nuevo proyecto representa un paso clave en la evolución de la movilidad urbana. Con esta iniciativa, Isuzu planea ofrecer autobuses de hidrógeno como alternativa complementaria a los eléctricos de batería, ampliando las opciones de transporte público de cero emisiones.

Toyota, por su parte, considera al hidrógeno una pieza esencial en la estrategia global para alcanzar la neutralidad de carbono. La compañía trabaja activamente en toda la cadena de valor —desde la producción y el transporte hasta el almacenamiento y el uso— mediante alianzas con actores de distintas industrias.

El proyecto también contempla la cooperación con gobiernos locales y empresas para impulsar el despliegue de autobuses de hidrógeno en regiones estratégicas designadas por el Ministerio de Economía, Comercio e Industria de Japón en 2025. 

Con ello, Toyota e Isuzu buscan acelerar la descarbonización del transporte público y fomentar la adopción de soluciones energéticas limpias a gran escala.