Así probábamos la Chrysler Caravan

Recordamos el test de una de las vans más emblemáticas de las últimas décadas. En esta ocasión, la prueba de manejo corresponde a la edición de abril de 1997. Galería de fotos

Redacción Parabrisas

Este monovolumen intenta imponer aquí un moderno concepto en vehículos familiares.

Con la necesidad de un producto que revolucione el mercado automotriz norteamericano y acompañe su propio resurgimiento, Chrysler lanzó, en 1984, su primer Caravan. Y lo logró. Este monovolumen, denominado por aquel entonces "Magic Wagon", no sólo se transformó en el estandarte de la fábrica, sino que también significó el punto de partida para la creación de un nuevo segmento de vehículos concebidos esencialmente para el uso familiar.

Aquí, aunque la franja de los monovolúmenes es muy pequeña, la presencia de la Caravan no ha pasado inadvertida. El modelo actual muestra una evidente actualización en sus líneas con respecto a los anteriores y se destaca por un diseño moderno.

La trompa es corta y lanzada, formando casi una línea recta con el parabrisas, lo que obra en favor de una buena penetración aerodinámica para un vehículo de grandes dimensiones como este. Atrás la terminación del enorme portón también es redondeada y, de perfil, es notoria la amplia superficie vidriada.

Chrysler Caravan

Este conjunto viene acompañado de un motor V6 de tres litros que eroga 152 CV y una caja automática de tres marchas. A pesar de los 1.800 kg que pesa esta Caravan, "sale" muy bien con partida detenida y lo comprobamos en nuestra pista, donde tardó sólo 14s2 para acelerar de 0 a 100 km/h. Además, alcanza una velocidad máxima de 180 km/h -limitada por un corte de corriente- sin resignar confort de marcha y brindando una notable sensación de seguridad.

Con un tanque de combustible de 75 litros y con un consumo promedio de 9.1 km/l logra una autonomía de 697 km, aunque puede aumentar 200 km más viajando en ruta a aproximadamente 100 km/h. En caso de aceleraciones desmedidas y en ciudad, el consumo del V6 no perdona.

En el interior de esta Caravan se respira un ambiente luminoso y espacioso, lo que convierte a su habitabilidad en una virtud. El panel de instrumentos es de diseño moderno con grandes salidas de aire. A la izquierda del conductor se encuentra el comando eléctrico de los espejos externos y de las luces, aunque este último estaría mejor ubicado satelitalmente en el volante.

La consola central es muy atractiva y aloja los comandos del aire acondicionado, el equipo de audio, que a través de sus ocho parlantes diseminados por todo el interior ofrece un sonido excelente. Sin regulaciones eléctricas en la butaca, pero con la posibilidad de modificar la altura de la columna de dirección, la posición de manejo es comodísima e invita a realizar largos trayectos.

Chrysler Caravan

Además de las dos butacas delanteras independientes, cuenta con dos filas más de asientos para llevar cinco pasajeros, que ofrecen múltiples posiciones o se pueden extraer totalmente gracias a un práctico sistema de trabas con ruedas. El acceso puede ser por ambos lados, dado que Chrysler fue la primera en implementar la puerta corrediza también del lado izquierdo.

La selectora, muy suave, está ubicada al costado del volante y las marchas se indican en el tablero. La dirección asistida es impecable y de mucho valor para transitar en ciudad y al estacionar. En ruta, el andar es excelente, las suspensiones siempre se comportan muy bien y la insonorización del habitáculo redondea un confort interior sorprendente.

En materia de seguridad, los espejos externos cumplen bien con su cometido, y la visibilidad es buena en cualquier frente y sólo se puede complicar hacia atrás cuando viaje algún pasajero. A pesar de contar con ABS, tarda bastante en detenerse, aún accionando el pedal hasta el fondo. Necesitó 44.2 metros para parar de 100 km/h a 0. Mucho confort y potencia son los atributos que ofrece Chrysler en esta Caravan a todo aquel que pueda pagar u$s 41.890 para tenerla.

Por: Jorge De Negri
Fotos: Juano Fernández

OTROS DATOS

Motor: 3.0 con cuatro cilindros en V (V6) y 152 CV

Transmisión: Automática tres marchas

Velocidad máxima: 180 km/h

Aceleración 0-100 km/h: 14,2 segundos

Distancia de frenado a 100 km/h: 44,2 metros

Consumo en ruta a 100 km/h: 11,9 km/l

Consumo en ciudad: 6,5 km/l

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