Hijo del afamado ingeniero francés León Cibié, Pierre nació en París y de muy pequeño se acercó y estudió las actividades de su padre, pionero de la electricidad, quien en 1903 fundó la compañía Astra para producir lámparas de arco. En 1913 León proveyó de sistemas de iluminación para pistas de aterrizaje a las fuerzas armadas de su patria, con un equipo integrado por el proyector, una dínamo y el regulador de voltaje. Gracias a este sistema y durante la Primera Guerra Mundial, los aviones de combate pudieron despegar y aterrizar de noche. Al terminar el conflicto León tuvo rápidamente en cuenta a la industria del automóvil, que ya se perfilaba como un gran cliente de sus productos. Es aquí cuando Pierre Cibié, recibido de ingeniero en la Escuela Politécnica de París, y con el apoyo de su padre, funda en 1919 la firma que lleva su apellido y comienza a producir unidades de faros para los automóviles. Renault fue su primer cliente, y se mantuvo fiel a la marca Cibié durante veinte años. Sus modelos llevaban faros de esa marca solamente, aunque ya había competencia con las firmas Marchal y Ducellier, también francesas.
Al terminar la Segunda Guerra Mundial la firma fue establecida en la rue Haxo, de París. Después de la liberación y tras la muerte de Louis Renault, que tenía acciones en la empresa Cibié, esta última fue nacionalizada y transferida a un establecimiento de Renault en Bobigny, en una planta de 12.000 metros cuadrados. Además de proveer a Renault, Cibié comenzó a suministrar faros a Peugeot y Simca.
Pierre Cibié fue un profesional muy activo en el campo de la investigación de los sistemas de iluminación de los vehículos, y así ideó en 1931 un sistema de luz polarizada para evitar el encandilamiento del conductor al cruzarse con otros vehículos que circulaban en sentido contrario en la noche. En 1933 concibió los vidrios de los proyectores dotados de estrías internas, sobre la base de la ciencia óptica de la dioptría (unidad de medida de convergencia de los sistemas ópticos), para mejorar la iluminación en la ruta. En la actualidad los faros tienen cristales hechos de policarbonato y son totalmente transparentes. Su flujo luminoso es modulado por las formas del reflector.
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