Decepcionado por el equipo McLaren, pero sobre todo por Honda, que no es capaz de darle un auto en condiciones de competir (ya no digamos de luchar por el campeonato 2017), Fernando Alonso compitió hace dos semanas en Indy 500. Le fue muy bien, aunque tuvo que abandonar.
De regreso a la F.1, hoy en Montreal, donde el domingo se correrá el GP de Canadá, el asturiano siguió propiciando su adiós a la categoría. Más afilado que nunca, reafirmó que si llegara a haber 25 carreras en el calendario, él renunciaría: “A esta altura de mi carrera, considero que una buena calidad de vida es más importante que tomar parte en más temporadas de F.1”.
En cuanto a su ida de McLaren, declaró que eso sucederá si no gana este año una carrera (obra de un milagro, acotamos), y en cuanto a Indy, entre otras cosas que es un ambiente mucho más relajado que el de la F.1: “Acá pensamos demasiado acerca del futuro, hoy no ha habido preguntas sobre la carrera del domingo, no estamos enfocados en lo que sucederá este fin de semana.
Las emociones se congelan un poco cuando llegás y no se habla de la carrera”. Habría que recordarle que cada vez que uno pregunta en ese sentido los días jueves, las respuestas son invariablemente las mismas: “Ya veremos, no se puede decir mucho hasta que nos subamos a los autos…”
Alonso, que cumplirá 36 años el próximo 29 de julio, ya no tiene nada que perder en la F.1 y mucho por ganar en otras lides: “Amo el automovilismo y sé que puedo ganar en la categoría que sea”. Lo que se dice un verdadero “driver”, acaso ya no tan joven para una F.1 cada vez más vertiginosa...
