Las primeras vueltas de Michael Schumacher a bordo de una Ferrari ocurrieron en noviembre de 1995, en una sesión privada de ensayos en Fiorano sobre un Ferrari 412 T2 pero con motor V10, no el V12 utilizado por Jean Alesi y Gerhard Berger en la temporada de ese año. Por entonces el Kaiser tenía 26 años y cinco de experiencia en la F1, de la que era bicampeón con el Benetton Renault. A Mick, su único hijo varón, la oportunidad de subirse a un auto de la Scuderia le llegará bastante antes: el joven alemán de 20 años probará la SF90 de Sebastian Vettel y Charles Leclerc la próxima semana en el Autódromo de Bahrein.
La noticia de la firma de Mick con Ferrari para integrarse a su programa de desarrollo de jóvenes pilotos fue una de las más resonantes de este año en la Fórmula Uno. Es que el apellido Schumacher mueve montañas en el automovilismo y es como una religión para los tifosi, devotos de quién ganó cinco de los títulos de pilotos obtenidos por el "Cavallino Rampante".
Desde allí, parecía cuestión de tiempo ver cuando subirían a Mick a la Ferrari, pero sorprende un poco ver que hayan tomado la decisión tan rápido. Campeón de la Fórmula 3 Europea en 2018, el piloto alemán aún no hizo su debut en Fórmula 2: lo hará este fin de semana en el Gran Premio de Bahrein, con el equipo Prema, el mismo con el que Charles Leclerc se consagró campeón en 2017.
Después de las carreras del fin de semana, los equipos se quedarán dos días más en el circuito asiático realizando distintos ensayos. Se espera que Schumacher gire el 2 de abril en el Ferrari y al día siguiente en el C38 de Alfa Romeo, “equipo B” de la Scuderia en el que probablemente Mick realice sus primeros pasos oficiales en Fórmula Uno si su carrera continúa escalando.
Las comparaciones serán inevitables para los fanáticos. Mick ya comentó al respecto que “son un honor ya que ser comparado con el mejor piloto de la historia de la Fórmula Uno es el objetivo de cada automovilista” y que solo quiere aprender y mejorar. El joven Schumacher ya pilotó un viejo Fórmula Uno en una exhibición en Spa-Francorchamps, más precisamente el Benetton B194 con el que su padre ganó su primer campeonato mundial, pero este será su primer ensayo a bordo de un auto actual.
Para Mattia Binotto, actual director del equipo Ferrari e ingeniero en la época del pentacampeonato de Michael Schumacher “esto representa una emoción especial, por conocer a Mick desde que nació”, pero aclaró que más allá de eso lo eligieron “por su talento y las cualidades humanas y profesionales que lo distinguen más allá de su corta edad”.
