El Ford es nacional, el VW importado. Los dos tienen excelentes aptitudes y rendimientos; el Focus es dinámico y espacioso, y el Bora está mejor equipado. Pero el del óvalo se impone con un precio mucho más competitivo.
La euforia ya pasó: estos dos autos fueron lanzados hace un par de años. Primero fue el Ford Focus, que llegó desde Europa con bombos y platillos para luego ser construido en el país. Luego desembarcó, más tímidamente y desde México, el Volkswagen Bora para posicionarse como un sedán elegante. El primero encontró el éxito rápidamente con buenas ventas e importantes premios; el segundo todavía busca ganar un lugar de respeto en el segmento. Son rivales directos y fueron probados en varias ocasiones por Parabrisas. Pero en esta oportunidad la propuesta es enfrentar las versiones con motor TD de 90 CV.
Tras recorrer un par de miles de kilómetros por rutas, autopistas, caminos de tierra, circuitos y las accidentadas arterias de Capital Federal, se concluye que estos modelos ofrecen confiabilidad mecánica, robustez y marcadas aptitudes ruteras. Con ventajas y desventajas, el Ford se destaca por su comportamiento dinámico y su espacio interior, mientras que el VW los hace por su calidad de materiales y nivel de equipamiento. Dos vehículos muy recomendables para los tiempos que corren.
Diseño - Aerodinámica
El Focus muestra un diseño muy osado, de líneas fluidas pero con un remate de baúl (en la versión sedán) que cuesta digerir si se lo compara con el hatch del mismo modelo. Por su parte, el Bora tiene una imagen más suave, pacífica y elegante. A primera vista se lo puede confundir con el Passat, sobre todo al observarlo de perfil o de atrás. Cada cual con lo suyo y con fórmulas distintas, sus estilos son originales y no se parecen a ninguno de sus competidores.
Confort - Espacio interior
En la parte delantera, en ambos sobra lugar para conductor y acompañante, pero el diseño de las butacas está mejor resuelto en el Bora, con una muy buena sujeción del respaldo, apoyacabezas reclinables y el práctico y cómodo sistema de regulación en altura por medio de una palanca. Estas virtudes se aprecian sobre todo en viajes largos, en donde el Focus, con ajuste lumbar, puede llegar a cansar un poco debido a su nivel de mullido. En los dos casos el volante tiene buen grip (el del Ford forrado en cuero) y permiten regularse en altura y profundidad.
En las plazas traseras sale ganando el producto del óvalo y se evidencia su tamaño, entre los más grandes del segmento. El espacio disponible para las piernas es más amplio y el respaldo un poco más alto, lo que permite viajar cómodamente a dos adultos. El VW deja muy poco lugar para las piernas, lo que obliga a correr hacia adelante las butacas de conductor y acompañante. Por otra parte, el respaldo trasero es demasiado vertical. En cuanto a los baúles, el Ford dispone de 490 dm3 mientras que el VW ofrece 455. Los dos respaldos se abaten para ganar capacidad.
Motor - Prestaciones
Sin grandes alardes tecnológicos desde que fueran lanzados, los propulsores diésel (1.8 el Ford y 1.9 el VW) cuentan con sistema de inyección directa, turbo e intercooler. Cada uno eroga 90 caballos y se luce por su alto nivel de rendimiento. En cuanto a prestaciones, el Ford se destaca en aceleración y velocidad final (de 0 a 100 km/h en 13s3 contra 13s7 y 178,9 km/h contra 178,5 km/h, respectivamente); el VW, en cambio, se luce en elasticidad (de 60 a 120 km/h en 5a demora 22s8 s contra 28s del Ford).
Esto se debe a que el Bora dispone de mayor torque (21,4 kgm frente a 20,4 kgm) entregado a 1.900 rpm, 100 menos que en Ford, y a la escasa respuesta de éste último por debajo de las 2.000 rpm. En cuanto a los rendimientos, son parejos, con una leve ventaja del Bora: 16 km/l de promedio entre ruta y ciudad contra 14,7 km/l del Focus. En cuanto a la sonoridad, en el VW se filtran menos ruidos.
Instrumental - Equipamiento
En este sentido existe un contraste; en el Bora, el tablero y el instrumental son muy sobrios y están correctamente ubicados. En el Focus, en cambio, la plancha donde se alojan los comandos de ventilación presenta un estilo más personal y atractivo. donde el Focus, con ajuste lumbar, puede llegar a cansar un poco debido a su nivel de mullido. En los dos casos el volante tiene buen grip (el del Ford forrado en cuero) y permiten regularse en altura y profundidad.
En las plazas traseras sale ganando el producto del óvalo y se evidencia su tamaño, entre los más grandes del segmento. El espacio disponible para las piernas es más amplio y el respaldo un poco más alto, lo que permite viajar cómodamente a dos adultos. El VW deja muy poco lugar para las piernas, lo que obliga a correr hacia adelante las butacas de conductor y acompañante. Por otra parte, el respaldo trasero es demasiado vertical. En cuanto a los baúles, el Ford dispone de 490 dm3 mientras que el VW ofrece 455. Los dos respaldos se abaten para ganar capacidad.
Motor - Prestaciones
Sin grandes alardes tecnológicos desde que fueran lanzados, los propulsores diésel (1.8 el Ford y 1.9 el VW) cuentan con sistema de inyección directa, turbo e intercooler. Cada uno eroga 90 caballos y se luce por su alto nivel de rendimiento. En cuanto a prestaciones, el Ford se destaca en aceleración y velocidad final (de 0 a 100 km/h en 13s3 contra 13s7 y 178,9 km/h contra 178,5 km/h, respectivamente); el VW, en cambio, se luce en elasticidad (de 60 a 120 km/h en 5a demora 22s8 s contra 28s del Ford). Esto se debe a que el Bora dispone de mayor torque (21,4 kgm frente a 20,4 kgm) entregado a 1.900 rpm, 100 menos que en Ford, y a la escasa respuesta de éste último por debajo de las 2.000 rpm.
En ambos casos los cuadrantes son grandes y fáciles de leer. Pero el nivel de información del Ford es mayor, ya que cuenta con computadora de abordo, que indica, entre otras cosas, consumos, autonomía y temperatura. El equipamiento de ambos se enumera en los recuadros respectivos, pero vale mencionar algunas diferencias. El Bora tiene pasacasete en lugar de CD y carece de computadora. Pero, a su favor, cuenta con cruise control, techo solar, airbags laterales y discos de freno traseros, elementos no disponibles en el Ford.
Dirección - Suspensión
Para los exigentes en materia de manejo, el Ford se lleva las palmas. El conjunto de dirección y suspensión del Focus es sobresaliente, con un excelente aplomo para doblar rápido. Es muy preciso, seguro y responde de la mejor manera, aun en situaciones límite. El Bora, en cambio, se muestra algo subvirante en curvas lentas pero ofrece un mayor confort de marcha en ciudad. Su filosofía es más tranquila. El despeje del Focus es mayor y se adapta mejor que el VW a la accidentada topografía local.
Transmisión - Caja
Pese a que el Bora tiene las relaciones de caja más largas, la eficaz respuesta de su motor a bajos regímenes permite lograr muy buena elasticidad. El Focus es más lento y la esacasa respuesta del motor por debajo de las 2.000 rpm lo perjudica, sobre todo en cuarta y quinta. Con una impecable transmisión de potencia en los dos vehículos, en el caso de las selectoras ambas son muy rápidas, suaves y ofrecen recorridos cortos, aunque a la hora de las exigencias la del Ford se muestra más precisa.
Seguridad - Frenos
Al frenar, el Bora hace notar la eficacia de los cuatro discos de frenos y el ABS; el Focus, también con ABS, dispone de campanas atrás y acusa una leve fatiga ante detenciones reiteradas. Ambos están equipados con cinco apoyacabezas y sus respectivos cinturones inerciales. El VW dispone de cuatro airbags, mientras que el Ford sólo cuenta con dos, y ambos ofrecen regulación de altura de faros y luces antiniebla. El Ford aventaja con luz de estacionamiento, y el poder lumínico de las ópticas es levemente superior. En el manejo veloz y maniobras de emergencia, el Focus transmite mayor seguridad. En cuanto a la visibilidad, el Bora está limitado con un pequeño retrovisor derecho que requiere un período de acostumbramiento.
Precio
Estos productos gozan de excelente reputación. Pero los avatares económicos produjeron un desequilibrio en los precios. Al cierre de esta edición, el Ford costaba $49.900, y el VW $62.802, una brecha grande si se considera que ofrecen prestaciones similares. Es cierto que el Bora dispone de mayor equipamiento, mejores materiales y es más silencioso, pero 13.000 pesos de diferencia no es poco.
Texto: Augusto Brugo Marcó
Fotos: Christian Welcomme
FICHA TÉCNICA
