Parece una noticia extraída del ámbito nacional, pero las declaraciones llegan desde Europa. El presidente de Renault descartó la posibilidad de que el Gobierno francés nacionalice la empresa automotriz (en la que el Estado galo tiene una participación del 15 por ciento) luego del aporte de capital que la terminal recibió de las arcas públicas de ese país.
En una audiencia en el congreso francés Jean-Dominique Senard, presidente de Renault, aseguró que: "(La estatización de la empresa) No está sobe la mesa. No tengo nada en contra del Estado, solo digo que no es útil gastar el dinero de los contribuyentes para invertirlo en una empresa que necesita encontrar sus propios recursos".
La compañía fabricante de automóviles aprovechó la ayuda estatal para hacer frente a la pandemia de coronavirus a través de un préstamo garantizado por el estado de 5 mil millones de euros.
Senard dijo que el préstamo ayudará a mejorar la situación de la tesorería de Renault. Ese dinero, que es manejado por bancos comerciales y garantizado por el Gobierno, es una “red de seguridad” ya que la pandemia ha creado algunos problemas financieros para la empresa.
