dilanbl_/?hl=esDesde el pasado 22 de octubre, Giorgia Meloni se convirtió en la nueva Presidente del Consejo de Ministros de Italia, y más allá de que aún falta para saber en la práctica las diferentes medidas que llevará a cabo, hay otras que ya se pudieron observar, incluso previo a llegar al poder.
Se trata de la flota de vehículos presidenciales y en especial aquellos modelos encargados de transportar desde ahora en más a la mandataria italiana. La decisión fue apostar por referentes nacionales (italianos) que a su vez cuenten con las medidas de seguridad necesarias para proteger a la jefa de estado.
Para saber más sobre esta temática, dialogamos con Silvia Giorgetta, ingeniera nacida en Argentina y CEO de producción de vehículos especiales de Stellantis. Desde hace décadas trabaja ligada al rubro automotor y durante los últimos meses estuvo a cargo del desarrollo del Alfa Romeo Giulia, entre otros automóviles presidenciales, que ya son utilizados por Meloni.
Al consultarle acerca de los vehículos escogidos por los mandatarios italianos, nos respondió que a lo largo de los últimos años se utilizaron varias unidades de Volkswagen como Passat, pero la idea fue virar hacia unidades nacionales ("made in Italy").
Hasta el momento, no se tenían modelos completamente italianos de gran tamaño, sino que eran más chicos como el Giulietta (Alfa Romeo).
Ahora es distinto, ya que se pudieron desarrollar vehículos de mayores dimensiones como los recientes Giulia y Stelvio (ambos utilizados por la flota presidencial de Meloni).
Si bien la motorización continúa sin cambios, se modificaron las suspensiones, mientras que el peso aumentó (en especial por el blindaje), fomentando la robustez. A su vez, también se realizaron trabajos desde el punto de vista de la navegación.
La elección de estos Alfa Romeo se hizo no sólo por una cuestión de que la marca “gusta mucho” en el país europeo, sino que fue necesario un proceso de licitaciones públicas que la compañía ganó (viene triunfando desde hace años), donde desde el Estado se verificaron las ofertas y se realizaron las compras correspondientes.
Obviamente, también aprovechamos para consultar si en todos los países se lleva un procedimiento similar, aunque Giorgetta nos contó que cada mercado tiene requisitos diferentes (motores, dimensiones, entre otros). Las cuestiones geométricas también son relevantes, debido a que algunos mandatarios se inclinan por sedanes, como sucedió con Sergio Mattarella, mientras que otros prefieren los SUV.
A la hora de desarrollar vehículos de estas características se tienen en cuenta las potencialidades, por ejemplo, en un Giulia se busca más la deportividad, mientras que en los SUV un mayor espacio y mejor habitabilidad.
Sin embargo, la CEO de producción de vehículos especiales de Stellantis indicó que depende del cliente la elección entre un SUV y un sedán. Según su parecer, no cree que un primer mandatario se incline demasiado por un sport utility, aunque tal vez en los ministros es más común debido a las comodidades y su acceso.
Sea como sea, las repercusiones de ver a la Presidente del Consejo de Ministros de Italia a bordo de un vehículo italiano fueron muy fuertes. Además, como mencionamos anteriormente, Stellantis se encuentra ganando las licitaciones no solo de la flota presidencial, sino también en fuerzas del orden, con modelos muy importantes y robustos en la operatividad. Así, se destacan unidades para otras áreas de la administración pública, sumado a blindados y semi blindados.
Por último, Giorgetta nos comentó acerca de que el mundo automotor va hacia la personalización de cada usuario particular, mientras que la electrificación también es importante (híbridos y completamente eléctricos).
Es por eso que indicó que el próximo Giulia de las fuerzas del orden será myld-hybrid, mientras que no sería extraño si en el futuro haya un modelo completamente eléctrico para la flota presidencial.
