Porsche reimprime manuales de sus autos clásicos

La marca de Sttutgart eligió el camino correcto: resucitó más de 700 explicativos creados para que los usuarios conozcan los detalles de sus modelos. Autos clásicos, formato clásico.

Soy un hombre de la gráfica. Nací en el periodismo en esos ambientes en los que repiqueteaban los golpes certeros de los teclados de las Lexicon, donde las hojas pautadas se abrían paso entre los escritorios para, luego, llegar hasta el momento supremo, la impresión. Esa época, lejana, me marcó a fuego, es mi esencia. Y aunque hoy las nuevas tecnologías mandan, no puedo evitar la emoción cuando veo y escucho a la KBA, la gigantesca planta impresora de Perfil en funcionamiento: el papel girando en la rotativa, el olor de la tinta y el sonido del proceso no tienen comparación.

Por eso, cada vez que escucho que alguien dice “El papel va a desaparecer”, siento un profundo dolor. Mientras, sigo escribiendo estas líneas para la edición digital de Parabrisas...

Sin embargo, una automotriz se apiada de mí “digitalmente golpeado espíritu de periodista gráfico” e intenta levantarme el ánimo, aunque seguramente jamás lo sepa.

Porsche acaba de anunciar que reimprimió más de setecientos manuales de varios de sus modelos clásicos. Es raro que una compañía de este prestigio, una de las más avanzadas en materia de modelos deportivos, tanto por diseño como por tecnología, privilegie este formato por sobre los cada vez más populares y económicos soportes digitales. Pero es aquí donde aparecen las ventajas del papel: es más elegante y confiable.

Por otro lado, es necesario considerar que estamos hablando de autos clásicos (los Porsche 356 de 1952 o los 911 de la serie 996, entre otros), modelos a los cuales les es dado llevar en la guantera un manual del usuario excelentemente impreso y encuadernado y no un pendrive dispuesto a extraviarse en la primera curva.

Claro que el paso del tiempo deja en evidencia las debilidades del papel y es justamente por eso que la marca alemana decidió reimprimir esos setecientos manuales que ya están disponibles en las agencias de la marca. Como contrapartida, la mayoría de los Porsche producidos en estos más de setenta años de vida de la marca siguen rodando por las rutas del mundo: según datos de la compañía más del 70 por ciento de los Porsche vendidos desde 1948 continúan funcionando.

“Junto a esos manuales del conductor también están incluidos los libros de garantía y mantenimiento, así como la descripción de tipos, dimensiones y tolerancias. Entre otras cosas, estos documentos contienen información detallada de la puesta a punto de motores y chasis, y de las dimensiones de la carrocería. Cada reimpresión es fiel a la versión original en términos de aspecto y calidad.”, aseguran desde Porsche.

El tiempo pasa y las tecnologías nos cambian la vida, casi siempre para bien. Pero hay algunas cosas que deben mantenerse como fueron creadas. Después de todo es en el origen donde radica el prestigio, incluso cuando los detalles están en un manual… de papel.