La Serie 4 de BMW nació para reemplazar a las versiones Cabrio y Coupé del Serie 3. Con sutiles cambios estéticos respecto de aquel que manejamos en Las Vegas y que publicamos en la edición de febrero de 2014, este producto viene para ocupar un lugar único en el segmento de los medianos premium.
La gama se complementa con el Coupé, el M4 y el Gran Coupé y las principales modificaciones se advierten en los paragolpes, en la parrilla y en la incorporación para toda la gama de faros de led para todas las funciones de iluminación.
Potencia con eficacia
En la Argentina este modelo dispone de una sola motorización. Se trata de un naftero de seis cilindros en línea, con 3.0 litros, con inyección directa y turbo, para obtener 326 CV a 5.500 rpm.
Está asociado a una caja automática de ocho velocidades y tracción trasera. En las pruebas logramos una velocidad máxima de 251,3 km/h, mientras que la aceleración de 0 a 100 km/h fue de 5,3 segundos. En elasticidad también sorprende con tan solo 3,2 segundos para trepar desde los 80 a los 120 km/h.
Este motor se caracteriza por el bajo nivel de consumo. En parte, gracias a una serie de medidas englobadas en la filosofía EfficientDynamics, que utiliza recursos tales como, recuperación de la energía de frenado, dirección asistida electromecánica, función Auto Start-Stop y neumáticos de menor resistencia en el rodaje. Además, su coeficiente aerodinámico es un apropiado Cx 0,30.
La caja de ocho marchas con convertidor de par acompaña con un excelente comportamiento, tanto en automático, como en el modo secuencial, en el que las levas del volante obedecen, las órdenes del conductor incluso cuando se las exige con rápidos rebajes.
La gran cantidad de marchas le permiten un amplio rango de relaciones, hasta llegar a una larga octava, con la cual se puede viajar a 130 km/h en apenas 1.900 rpm.
Todos los atributos mencionados colaboran para que el consumo sea bastante moderado, a pesar de la potencia. En ciudad la cifra obtenida fue de 8,8 km/l, en tanto, en ruta, a 90 km/h y 120 km/h constantes, los resultados fueron de 17,7 y 11,8 km/l, respectivamente.
Versátil
Los atributos deportivos se combinan con un excelente desempeño dinámico que, al igual que el comportamiento del motor, la dirección y la caja, puede variar de acuerdo al modo de conducción seleccionado (Sport+, Sport, Comfort y Eco Pro).
De esta manera, entre lo que más valoramos de poder configurar el auto a gusto, es la posibilidad de variar las suspensiones de acuerdo a la ocasión.
Así, de contar con un vehículo muy estable y fácil de llevar en las curvas, pasamos a la ciudad con menos dureza de los amortiguadores, disminuyendo de esta manera el andar áspero que caracteriza a la mayoría de los autos de su tipo. La dirección está asistida eléctricamente y es muy directa, aunque para maniobras cortas resulta algo pesada.
Al aire libre
Sin duda, el gran atractivo de este modelo es la posibilidad de abrir y cerrar el techo en apenas 24 segundos, mediante una acción muy meticulosa en la que las piezas se van encastrando con gran precisión, quedando en todos los casos con una terminación admirable.
Este sistema del techo retráctil de tres segmentos cuenta con un aislamiento acústico mejorado, que absorbe de manera efectiva las los sonidos exteriores.
Para que el uso del auto con el techo abierto no se limite a los días de calor, este Serie 4 dispone de un sistema de calefacción a la altura de la nuca. Además, cuando circula descapotado, el climatizador regula automáticamente la temperatura del auto en función de la temperatura exterior y la velocidad a la que circulamos.
Sin embargo, la adopción de este tipo de techo le quita mucho espacio al baúl. Respecto del Coupé el volumen se reduce a la mitad (445 litros contra 220 litros del Cabrio con el techo abierto o 370 cuando está cerrado) y la visibilidad posterior a través de la luneta es bastante limitada.
Esta última falencia se compensa, en parte, con la eficiente cámara de marcha atrás y los sensores de estacionamiento, también ubicados en el paragolpes delantero.
En un interior de sobrada calidad y aspecto muy sobrio, el espacio para los de adelante es amplio, ofreciendo butacas deportivas con reglaje eléctrico que incluye el ajuste de los pétalos laterales. Al igual que el volante, dichos asientos ofrecen calefacción, a la que se le suma el calentador de nuca. Las plazas traseras son para dos ocupantes y el espacio es muy limitado.
Completo y seguro
Dentro de la larga lista de equipamiento destacamos, el Paquete M Sport, que incluye varios detalles estéticos que lo vinculan con la división deportiva M de la marca, como los cálipers en color azul y apliques e insertos especiales, la mayoría acompañada con la letra M.
Resaltamos, además, la pantalla multifunción de 8,8 pulgadas y el sistema de sonido Harman Kardon y la apertura y cierre del baúl a través de un movimiento del pie.
En contramano de nuestras preferencias, no tiene rueda de auxilio, carencia que se reemplaza por el sistema Run Flat en las ruedas titulares. En materia de seguridad dispone de airbags para el conductor y acompañante, airbags laterales delanteros, airbags de cabeza adelante y atrás, sensores de impactos e indicador de pinchaduras.
Oculta en la parte posterior se encuentra una barra antivuelco que consta de dos elementos de aluminio macizo que se activan en menos de 200 milésimas de segundo si el vehículo se encuentra a punto de tumbarse. Cuenta también con el sistema que se conoce como Full led, con encendido y apagado automático de las luces altas en función al tránsito.
Único
El precio de 116.900 dólares es casi tan exclusivo como esta variante, que por el momento no tiene competidores directos. Y una muy buena noticia: la garantía, que es de tres años, a partir de ahora pasó de los 100 mil a los 200 mil kilómetros.
