De un tiempo a esta parte, la actualidad del mercado automotor argentino y su industria no vienen siendo las esperadas. Y en el caso de General Motors en particular, durante los últimos meses la compañía estadounidense se ha visto obligada a parar la producción del Tracker en su planta de General Alvear (Santa Fe), por diversos inconvenientes, entre ellos el suministro de piezas de proveedores afectados con los pagos al exterior.
Básicos:
Velocidad máxima: 181,5 km/h / Potencia: 132 CV / Consumo promedio: 14 km/l / Precio: $ 31.916.900
Diseño/Aerodinámica (✭✭✭✭): Estéticamente es uno de los modelos más modernos de su categoría y este look deportivo le sienta bien.
Confort/Espacio interior (✭✭✭): La habitabilidad está en concordancia con la de sus competidores así como la calidad general, pero hay algunos materiales y encastres mejorables.
Motor/Prestaciones (✭✭✭1/2): Eficiente, logra prestaciones correctas yun consumo promedio muy bueno, aunque gasta mucho en ciudad.
Los más: Estilo deportivo • Prestaciones • Equipamiento general.
Equipamiento/Instrumental (✭✭✭✭): La dotación es amplia, aunque la rueda de repuesto es temporal. Tablero combinado.
Suspensiones/Dirección (✭✭✭1/2): La dirección siempre se advierte liviana y ofrece buen radio de giro. El tren trasero es algo áspero en la ciudad.
Los menos: Rueda de auxilio temporal • Calidad de algunos materiales • Consumo urbano.
Transmisión/Caja (✭✭✭1/2): La respuesta de la caja muestra algunos retardos ante solicitudes repentinas. No tiene levas en el volante.
Seguridad/Frenos (✭✭✭1/2): Está muy bien equipado en este rubro, pese a contar con tambores traseros. En las pruebas frenó correctamente, pero mostró cierta tendencia a perder la línea.
Precio/Garantía (✭✭✭1/2): No es el más barato del segmento, pero tampoco el más caro. La garantía es de 3 años.
Teniendo en cuenta que este modelo se produce tanto en la Argentina como en Brasil, seguramente el impedimento industrial de la factoría cercana a Rosario sea el motivo principal por el cual esta nueva versión RS del Tracker arriba a nuestro mercado desde el país vecino.
Lo curioso es que el Tracker RS (lanzado hace más de un año en Brasil) es, junto con la versión Midnight, una opción más dentro del portfolio de GM, mientras que a nuestro país llega como una edición limitada de apenas cien unidades, algo verdaderamente llamativo ya que el Tracker fue el SUV compacto más vendido de la Argentina en 2023, y una nueva versión podría aumentar aún más su atractivo.
Así las cosas, del mismo modo que hizo con los Onix, Equinox y Cruze, Chevrolet suma una versión con estilo deportivo para su modelo más exitoso.
Rally Sport
Así identifica Chevrolet desde hace varios años a algunas de sus versiones especiales con estética deportiva, pero mecánica convencional: los verdaderamente “picantes” llevan la nomenclatura SS, en referencia a "Super Sport".
Por eso la clave del Tracker RS radica en su apariencia, dado que no tiene alteraciones mecánicas e incluso no es la versión más encumbrada de la gama: toma como base el nivel intermedio LTZ, al que agrega -además del maquillaje deportivo-, algunos elementos de confort.
Manteniendo las dimensiones y características ya conocidas, hay que reconocer que ese efecto visual le sienta muy bien y refuerza su costado aspiracional sobre todo para el público más joven.
Disponible en colores blanco, rojo, gris o negro, además de lucir el emblema RS adelante y atrás, este Tracker se destaca por su oscura parrilla frontal con diseño de panal de abejas, protector negro brillante en ambos paragolpes, espejos retrovisores exteriores y logos en el mismo tono.
Las llantas de 17 pulgadas están pintadas con un tono negro brillante denominado “High Gloss”, en tanto que los faros full led disponen de una máscara oscurecida que intensifican su look deportivo. Puertas adentro, lo más trascendente es el tapizado com- binado de cuero ecológico con costuras rojas que también se replican en el revestimiento del volante y el panel de a bordo, que en nuestra unidad de prueba combinaban con el color de la carrocería.
En materia de conectividad, el Tracker RS ofrece el ya característico sistema de infoentretenimiento MyLink con proyección inalámbrica, aplicación myChevrolet y los servicios de asistencia satelital OnStar y Wi-Fi nativo a bordo, estos últimos disponibles mediante una suscripción adicional.
Respecto de la variante LTZ que toma como base, el RS suma techo panorámico corredizo (disponible únicamente en la Premier), y mantiene el aire acondicionado manual, en tanto que el comando digital de la climatización y el cargador inductivo para teléfonos celulares siguen siendo exclusivos de la versión Premier.
Tres cilindros, turbo
Decíamos al comienzo que debajo del capó no hay novedades en este Chevrolet Tracker. Al igual que toda la gama, el RS se sirve del conocido motor turbo 1.2 de tres cilindros que desarrolla 132 caballos de potencia y entrega 19,4 kgm de torque, asociado con una caja automática de seis velocidades que envía el par a las ruedas delanteras.
Se trata de un conjunto que le sienta bien a esta carrocería de 1.271 kilos, permitiendo que su desempeño sea muy ágil en toda situación de marcha. Circulando sin apuros no hay nada que objetarle a la transmisión, pero si es necesario acelerar de manera intempestiva muestra cierto retardo, con el consecuente característico “ronquido” de los tres cilindros del motor.
En cuanto a las prestaciones, el Tracker es de los más veloces de su clase, alcanzado una velocidad máxima de 181,5 km/h, en tanto que también se destaca en los procesos de aceleración: por ejemplo, de 0 a 100 km/h tarda poco más de 10 segundos, mientras que para pasar de 80 a 120 km/h (lo que da muestra de su capacidad para realizar sobrepasos) precisa 7,8 segundos.
El consumo también es destacado. En promedio medimos un rendimiento 14 km/l, cifra que encuentra como dato relevante los excelentes valores que obtuvimos en ruta a velocidad constante (18,4 km/l a 90 km/h), ya que en ciudad el gasto de combustible fue elevado (9,7 km/l).
En líneas generales es un vehículo que ofrece un buen confort de marcha, aunque en ocasiones, sobre todo en ciudad, el tren delantero se advierte un tanto áspero, característica propia de las estructuras con ejes de torsión.
El comportamiento dinámico en ruta es adecuado. Claro que al exigirlo presenta sus limitaciones con un marcado rolido, a pesar de contar con una dirección eléctrica perfecta- mente asistida, no tan ágil ante maniobras bruscas.
El sistema de frenos respondió adecuadamente durante nuestras mediciones. Pese a contar con tambores en las ruedas traseras, para detenerse por completo desde los 100 km/h el Tracker RS necesitó 43,8 metros. Una distancia elogiable, aunque en algunas ocasiones la carrocería mostró cierta tendencia a perder la línea.
Marca el rumbo
Desde su lanzamiento en 2020, esta nueva generación del Chevrolet Tracker significó una bocanada de aire fresco en materia de seguridad para su segmento, ya que ningún rival directo ofrecía tantas soluciones por su precio de venta.
En ese sentido, además de los obligatorios frenos ABS (con EBD) y control de tracción y estabilidad (ESP), el RS cuenta con seis airbags (frontales, laterales y de cortina), alertas de ángulo ciego y colisión frontal, que se agregan al sistema de frenado autónomo de emergencia en caso de colisión inminente y asistencia al estacionamiento.
Chevrolet ya ofrece el Tracker RS a un precio de lista de 31.916.900 pesos, un valor a tono con las versiones comparables del variado universo SUV compactos en nuestro país.
Habrá que esperar un tiempo para saber si esta edición limitada de sólo cien unidades termina convirtiéndose en una variante más de la gama Tracker, en un reñido segmento que a partir de este mes tendrá entre sus filas el restyling del Volkswagen T-Cross (VER VIDEO) y próximamente será testigo de la aparición de la esperada nueva generación del Peugeot 2008 que supone “revolucionar” el segmento. ¿Responderá rápido GM con un restyling de Tracker?