Alpine atraviesa un momento de transición en su equipo de reserva, con dos bajas clave y movimientos que reconfiguran su plantel de pilotos. El francés Victor Martins, integrante de la Academia Alpine desde 2018, renunció a comienzos de marzo al considerar que no tenía oportunidades reales de ser titular. Pocos días después, fue fichado por Williams como corredor de reserva por decisión de James Vowles, su director deportivo. El galo compite actualmente en la F2 con ART Grand Prix.
La segunda salida fue la del Ryo Hirakawa, quien oficializó su salida de Alpine durante el último GP de Japón. Con respaldo de Honda y piloto de Toyota en el WEC, se unió a Haas, equipo con el que participará en varias sesiones de Libres 1: comenzando en Bahrein con el auto de Oliver Bearman, y luego en México, Barcelona y Abu Dhabi, con el de Esteban Ocon. Su llegada a esta escudería está alineada con el acuerdo que el equipo mantiene con la línea Gazoo Racing.
Mientras tanto, en Alpine crece la incertidumbre en torno a Jack Doohan. Aunque tanto Briatore como Oliver Oakes, director del equipo, evitaron presionar públicamente al australiano, el respaldo parece resquebrajarse. El ejecutivo fue claro tras su accidente en Japón: “Todo piloto de F1 tiene que rendir. Ellos lo saben. Siempre hay que decidir lo mejor para el equipo”.
Más allá del rendimiento, la preocupación más urgente es su estado físico. Pese a haber sido habilitado por la FIA tras un fuerte accidente en la P2 del GP de Japón, un video posterior lo mostró con visibles dificultades para salir del auto, recibiendo ayuda de Ocon y sin poder mover su mano izquierda. Exámenes posteriores confirmaron lesiones en su brazo y mano, por lo que permanece bajo supervisión médica. Se cuestiona cómo logró superar los controles previos a la carrera, considerando que uno de ellos exige salir del cockpit en siete segundos, algo difícil dada su condición.
Aunque fue confirmado para correr en Bahrein, su participación dependerá de su evolución. En caso de no estar en condiciones, será reemplazado por Paul Aron, piloto designado para esa fecha. Franco Colapinto, pese a los rumores, no está contemplado para competir, pero seguirá trabajando en el simulador en Enstone.
Sin embargo, el argentino está cada vez más cerca de su objetivo: subirse a un F1. Con Doohan en duda y dos pilotos de reserva menos, sus chances aumentan. Briatore lo sabe y por eso organizó pruebas de TPC (Testing of Previous Cars) con él y Paul Aron en Qatar e Italia, entre los Grandes Premios de China y Japón.
En Losail, Qatar, ambos rodaron con el A523 en condiciones climáticas adversas, que impidieron completar el programa. Aun así, Colapinto fue nueve décimas más rápido que Aron. Luego, en Monza, la diferencia fue aún más notoria: siete décimas en ritmo de carrera y medio segundo por vuelta, según datos que Alpine compartió oficialmente. En ese test también estuvo presente Williams, con Luke Browning y Victor Martins rodando con el FW45.
Flavio Briatore evalúa opciones mientras Alpine intenta revertir un flojo inicio de temporada, marcado por la falta de puntos, problemas de motorización y bajo rendimiento general del A525. La presión aumenta y no se descartan cambios, incluso en la alineación titular, si eso significa sumar en el campeonato de Constructores, clave para las ganancias de los equipos.
La próxima carrera será este fin de semana, del 11 al 13 de abril, en el circuito de Sakhir, Bahrein. Se correrá de noche, en un trazado técnico, con largas rectas y curvas exigentes que garantizan múltiples oportunidades de adelantamiento.
