Bentley Motors celebró su centenario con la presentación del Bentley EXP 100 GT en su sede de Crewe, Inglaterra. Este flamante prototipo muestra hacia dónde se encamina la marca en lo que a diseño y tecnología se refiere. Si bien se trata de un modelo futurista, pensado para el año 2035, exhibe rasgos de estilo que lo identifican con la marca, como los faros redondos que se unen a la parrilla en un guiño al célebre Bentley Blower y la carrocería alargada y elegante que recuerda a los clásicos más reconocidos.
Para la fabricación de este novedoso Gran Turismo de 5,8 metros de largo y casi 2,4 metros de ancho, se utilizaron aluminio ligero y fibra de carbono. También se le agregaron una serie de elementos decorativos realizados con cobre y aluminio en homenaje a los materiales que W.O. Bentley empleó en la aleación de los pistones para el famoso motor de aviación del BR1, el cual fue fundamental en la Primera Guerra Mundial.
Párrafo aparte merece la pintura exterior Compass, que contiene un pigmento sintético elaborado con cenizas de cascarillas de arroz recicladas.
Los artesanos de la compañía británica trabajaron con suma habilidad en el lujoso habitáculo, combinando los mejores materiales naturales, como la madera de río caída naturalmente de 5.000 años de antigüedad, un tejido similar al cuero ciento por ciento ecológico proveniente de la elaboración de vino, superficies de algodón bordado, entre otros. La luz también juega un rol importante para producir un entorno especial que favorece el bienestar físico y mental de los ocupantes.
Para disfrutar de un viaje relajado, el concept EXP 100 GT ofrece la opción de una conducción autónoma. Por otra parte, el asistente personal del vehículo se anticipa a las necesidades de los pasajeros y puede, asimismo, ofrecer un alto nivel de confort gracias a los conocimientos que posee de su propietario. También puede brindar información sobre las rutas, o sugerir viajes y distintas experiencias a bordo. Este asistente ocupa un espacio importante en la consola principal, donde se puede visualizar gracias a la luz que se proyecta sobre un cristal del condado inglés de Cumbria.
En cuanto al sistema de propusión, el modelo incorporará una batería que alimentará cuatro motores eléctricos que permitirán una autonomía de 700 kilómetros, una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 2,5 segundos, una velocidad máxima de 300 km/h y un par máximo de 1.500 Nm. Debido a su avanzada tecnología, la batería se podrá recargar hasta el 80 por ciento de su capacidad en apenas 15 minutos. De la recarga se ocupa de manera automática el asistente personal de Bentley.
