Durante las últimas horas se dio a conocer la triste noticia del fallecimiento de Joaquín Salvador Lavado Tejón, más conocido como Quino, un ícono del humor y las historietas argentina, donde su máximo éxito fue Mafalda entre 1964 y 1973, un clásico nacional.
Más allá de las grandes obras, el artista no sólo pensó en los personajes de la clásica tira, sino también en varios elementos de la cultura argentina, donde el rubro automotor tampoco pasó desapercibido. Como "representante" del mundo de los fierros, se destacaba el Citroën 2CV de la familia, conducido por el padre de la protagonista y su hermano Guille.
El auto del doble chevrón se destacaba por su diseño innovador y ruputirsta, sus suspensiones, la sencillez de los materiales, motor de muy baja cilindrada y hasta se puede decir que era un auto completamente extraño para la época.
En Argentina fue fabricado desde principios de los años 60', luego de más de una década de presencia en el exterior (desde 1948). En nuestro mercado tuvo etapas de gloria, de abandonos y de retornos al mercado (hasta 1990), ya bajo la denominación 3CV, sumado a los diferentes derivados.
El 2CV se convirtió un ícono de la cultura popular argentina, pero sus años más esplendorosos y revolucionarios fueron casi en sintonía con la historieta de Quino. Más allá de lo que significó Mafalda para nuestra sociedad, donde se destacaron muchos elementos tradicionales de aquellos años, el modelo del doble chevrón no fue un "personaje menor", incluso se convirtió en uno de los protagonistas desde el momento que llegó a manos del padre. A continuación, mirá las imágenes.
