Test: Audi A3 1.4 TFSI

Creció en dimensiones, pero bajó de peso. La nueva generación del compacto alemán ofrece una dinámica destacada, gracias a un chasis muy equilibrado y un motor eficaz de consumo bajísimo. Su condición de estatutario se advierte en el valor que trepa con los opcionales. Fotos. Galería de fotos

Redacción Parabrisas

Es una muestra de la eficacia que se consigue con la aplicación de nuevas tecnologías. En el nuevo A3, presentado en el salón de Ginebra, Suiza, en marzo de 2012, la clave está en la reducción del peso.

Utiliza la nueva plataforma MQB del grupo alemán en la que los ingenieros de Ingolstadt aplicaron, como elemento clave, la tecnología Audi Ultra que utiliza materiales livianos y de gran resistencia (como aluminio y aceros especiales) en sectores específicos del vehículo incluyendo, capó, motor, suspensiones y sectores del habitáculo.

Además, presenta un ajuste en términos de diseño que se advierte en un estilo actualizado, y cotas levemente acrecentadas con una distancia entre ejes más pronunciada que la serie anterior, que determina un baúl un poco más grande aunque sin modificar demasiado la “apretada” habitabilidad posterior. Esta característica, sumada al excelente desempeño del conjunto motor-caja y del chasis, hacen de este vehículo uno de los más atractivos entre los compactos premium.

Lea la nota completa en la edición nº 417 (julio 2013) de la revista Parabrisas.

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