Para muchas terminales la propulsión eléctrica representa uno de los caminos más viables en pos de reducir el impacto ambiental que generan los vehículos. Y en esa línea se mueve la alemana Audi al tiempo que explora otras tecnologías.
No obstante, la casa de Ingoldstadt acaba de anunciar su estrategia a corto plazo y en ella los vehículos ciento por ciento eléctricos ocupan un rol central. Según ese anuncio, serán treinta los nuevos modelos “amigables con el medioambiente” que lanzará hacia 2025 persiguiendo el objetivo de reducir un treinta por ciento las emisiones de C02 en el ciclo de vida de cada uno de esos modelos. De esos treinta, veinte serán de los llamados “cero emisiones”
Esos nuevos modelos serán producidos sobre la nueva plataforma PPE (Plataforma Premium Eléctrica), desarrollada exclusivamente para este tipo de unidades y que se sumarán a los que ya se conocen, entre ellos, el SUV ciento por ciento eléctrico e-tron, y a otros cuyo arribo a los mercados internacionales ya se ha anunciado, tales los casos del e-Tron GT concept (2020) y el Q4 e-Tron (2021).
Esa plataforma PPE fue desarrollada en conjunto con Porsche y está pensada para crear productos que se ubiquen por debajo de aquellos que surgen de la J1 (Audi e-tron y Porsche Taycan, por ejemplo) y por sobre los de la MEB (Volkswagen ID.3 y Seat el-Born, entre otros).
Acompañando esta estrategia Audi también se centrará en la expansión de la gama de modelos híbridos enchufables representada actualmente por A7 Sportback, A8, Q5 y Q7 Sportback. Modelos como A3 y Q3 también se podrían ver afectados por estos planes de electrificación en los cuales la marca alemana invertirá 14.000 millones de euros.
