Nikola es una startup que nació hace cinco años. Radicada en Arizona, Estados Unidos, se ha centrado en la producción de camiones y pick-up de propulsión alternativa, entendiendo por esto aquellas que surgen de los generadores eléctricos y de las celdas de combustible.
Cobró notoriedad cuando dio a conocer el diseño de una camioneta denominada Badger uno de los hechos que hicieron que el primer día de actividad en la bolsa de Nueva York alcanzara un valor de 26.000 millones de dólares, cotización que trepó hasta los 31.000 millones el día siguiente, es decir, mucho más de lo que valen muchas de las más importantes terminales automotrices.
Badger será una pick-up de doble cabina con capacidad para cinco pasajeros, de 5,8 metros de largo por 2,18 metros de ancho y 1,8 de alto, equipada con un motor que entrega 918 CV de potencia y 135 kgm de torque y que conseguiría una autonomía de 965 kilómetros. Además, podría acelerar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos, como una Ferrari F8 Tributo. Impresionante.
Según estimaciones, el valor de venta de esta pick-up en el mercado de los Estados Unidos se movería entre los 60.000 dólares y los 90.000 dólares, dependiendo de la versión.
Nikola: una fábrica en 2021
Ahora, Nikola es noticia otra vez ya que General Motors (GM) adquirió una participación del once por ciento en la prometedora Nikola. Al conocerse esta noticia las acciones de Nikola subieron un 45 por ciento.
Otras terminales, como CHN (Iveco), ya tenían participación en Nikola con negocios a partes iguales en el mercado europeo donde proyectan fabricar camionetas eléctricas en Alemania con baterías suministradas por Iveco.
Algunos pueden suponer que la de GM es una jugada arriesgada, y no se equivocan. Nikola no espera beneficios para el ejercicio 2020 pero sí confía en alcanzar una facturación de 1.000 millones de dólares en 2023.
En esta estrategia seguramente GM tendrá una participación importante ya que la casa de Detroit suministrará pilas de combustible de hidrógeno a Nikola para algunos de sus modelos.
Actualmente, Nikola no tiene una fábrica pero sí planea construir una de 112.000 m² al sur de Phoenix donde comenzar a fabricar camionetas en 2021. Estiman alcanzar una producción anual de 30.000 unidades con pila de combustible en 2027 y sumar 15.000 vehículos eléctricos el año siguiente.
Nikola es, de alguna manera, un nuevo ejemplo del éxito que puede conseguir un emprendimiento que surge como una startup. Seguramente, Trevor Milton, director de la compañía de Arizona, se ve reflejado en el carismático Elon Musk, CEO y fundador de Tesla, la automotriz que ha revolucionado el negocio en los últimos años y con la cual esta productora de camionetas tienen un vínculo imposible de ignorar, el nombre: recordemos que aquel genial inventor croata que, entre otras tantísimas cosas revolucionó la forma de obtener energía, se llamaba Nikola Tesla.
