Wolfgang Porsche: "No creo que todo el mundo quiera dejarse llevar"

El jefe del Consejo de Vigilancia de la compañía y nieto del fundador de la marca no cree que se avance hacia un futuro de conducción autónoma exclusiva. "No puedo imaginarlo", dijo.

Redacción Parabrisas

Motores más pequeños, conducción automática, energías alternativas... Las grandes tendencias del mundo automotor plantean un reto especial para marcas deportivas como Porsche, pero la automotriz alemana afronta confiada un futuro desafiante y cargado de novedades.

"Conducir un Porsche tiene que generar siempre placer y alegría. Y eso se logra mejor si uno mismo está al mando", explica Wolfgang Porsche, jefe del Consejo de Vigilancia de la compañía, en una entrevista con la agencia de noticias dpa durante el Salón del Automóvil de Frankfurt (IAA).

El nieto del legendario fundador de Porsche, emblema del auto deportivo, desecha así con elegancia los pronósticos de un mundo de vehículos autónomos y conductores que sólo introducen el destino en una computadora para luego ser transportados.

"No creo que todo el mundo quiera sentarse y simplemente dejarse llevar. No puedo imaginarlo en mi caso. Cada vez que conduce otra persona, la regaño porque siento que lo hace mal", explica el directivo, de 72 años.

Pero la idea de computadoras que desplazan al conductor no es la única que parece ir en contra de los sueños de potencia y velocidad que encarna un deportivo. Muchos fabricantes están trabajando también en motores más pequeños. Reducir el consumo es un reto cada vez más extendido.

¿Se imagina el jefe del consejo de vigilancia de Porsche que la automotriz, por ejemplo, reduzca de seis a cuatro cilindros los motores de su potente modelo 911?

"Eso debería preguntárselo a quienes toman las decisiones", responde escéptico Wolfgang Porsche. "Yo no soy un técnico, sino el jefe del Consejo de Vigilancia. Pero si fuese necesario, no tengo duda de que Porsche estudiará también este tipo de cuestiones", opinó.

Es el dilema de la automotriz mantener sus valores de conducción sin perder el tren de las nuevas tecnologías. Pero algo de la "esencia" original debe mantenerse, y Wolfgang Porsche tiene claro en qué consiste.

"Manejar un deportivo debe generar, ante todo, diversión", explica, al tiempo que añade: "Cuando conduzco un Porsche, no me importa sólo la velocidad, sino también la conducción deportiva, el rendimiento, las posibilidades de adelantar..."

Esos son los conceptos que deberían guiar el modo en que el grupo de Stuttgart asimila las nuevas tendencias del sector. "Trabajaremos siempre por ofrecer al cliente algo que le genere alegría", afirmó.

FUENTE: Heiko Lossie (dpa)