Durante los últimos años, los clientes argentinos de Honda se desacostumbraron a las novedades de la marca en materia de autos. Por diferentes motivos, la compañía nipona focalizó toda su atención en la producción local de motocicletas (mercado que lidera, además, en ventas y exportación) en su planta ubicada en la localidad bonaerense de Campana.
Básicos:
Velocidad máxima: 183,1 km/h / Potencia: 121 CV / Consumo promedio: 13,8 km/l / Precio: u$s 35.000
Diseño/Aerodinámica (✭✭✭✭1/2): Una nueva propuesta estética bien lograda y muy moderna, con una cabina que ofrece una destacada aislación acústica.
Confort/Espacio interior (✭✭✭✭): Su habitabilidad y modularidad son las referencias de este segmento. perdió capacidad de baúl.
Motor/Prestaciones (✭✭✭1/2): Las prestaciones son modestas con relación a su antecesor, pero mejora la calificación de consumo.
Los más: Confort de marcha • Habitabilidad • Calidad percibida • Seguridad.
Equipamiento/Instrumental (✭✭✭1/2): Buena calidad general y bastante completa dotación de confort, pero podía ofrecer más elementos por tratarse de una versión tope de gama.
Suspensiones/Dirección (✭✭✭✭): Pese a no contar con eje trasero independiente, el robusto esquema responde satisfactoriamente. Excelente trabajo de la dirección.
Transmisión/Caja (✭✭✭): A pesar de las levas y el modo sport, la respuesta de la caja es lenta en virtud de la potencia y el bajo torque del motor.
Los menos: Auxilio temporal • Respuesta de la caja • Prestaciones • Precio
Seguridad/Frenos (✭✭✭✭1/2): Eficaz performance del sistema de frenos y destacada dotación con asistencias a la conducción.
Precio/Garantía (✭✭1/2): Honda siempre posiciona a sus modelos en un rango de precios superior al de la mayoría de sus rivales. la garantía es adecuada.
Pero en épocas pasadas dicha factoría supo especializarse en la producción de autos: primero con el City (desde 2011) y luego con el HR-V (desde 2015), hasta que, por cuestiones estratégicas, en 2020 terminó mudando la producción de este modelo exclusivamente a la planta que tiene en Itirapina (Brasil).
Y es precisamente el país vecino el protagonista desde donde llega la noticia más esperada de Honda para el mercado argentino. Luego de lanzar en nuestro país el inédito ZR-V fabricado en México a fines del año pasado, la firma asiática presentó la nueva generación del HR-V, modelo con el que pretende volver a batallar en el segmento de mayor crecimiento en nuestra región: el de los SUV compactos.
Las virtudes de siempre
Los tiempos cambian, las tendencias estilísticas también. Por eso, el nuevo HR-V abandonó los llamativos trazos con tintes deportivos de su generación anterior e incorporó el nuevo ADN que Honda aplica a sus modelos más recientes. El resultado de todo esto son mayores curvaturas en las líneas de la carrocería y una parrilla frontal más voluminosa, recta y elevada, con faros rasgados que le aportan mucha personalidad al conjunto.
Al margen de lo visual, en esencia sigue siendo el mismo vehículo; tanto es así, que mantiene la plataforma de su antecesor y prácticamente las mismas dimensiones. Con 4,33 metros de largo y una distancia entre ejes 2,61 metros, sólo se modificaron el ancho (que creció dos centímetros para llegar a 1,79 metros), y la altura, que se redujo dos centímetros (1,59 metros), producto de la abrupta caída del techo a la altura de las plazas traseras.
Pese a este último detalle, el nuevo Honda HR-V mantiene la generosa habitabilidad y la modularidad de su antecesor (siendo de las mejores del segmento). Para compensar esa licencia en el diseño, los ingenieros de la marca inclinaron levemente los respaldos y aumentaron unos tres centímetros el espacio para las piernas, manteniendo el práctico sistema de cojines abatibles.
En contrapartida, eso afectó de manera directa la capacidad de carga del baúl, que se redujo considerablemente: de 437 a 354 litros. Como era de esperar, bajo el piso de este volumen se aloja una rueda de auxilio de uso temporal.
Mejora generacional
Dentro del habitáculo se percibe una agradable sensación entre la calidad percibida y el diseño del instrumental. El tablero ofrece dos relojes tradicionales de aguja y un display digital central para una completísima computadora de a bordo.
La plancha central combina materiales plásticos con revestimientos acolchados, mientras que algunas inserciones de aluminio –como las de la ventilación y la climatización digital– le aportan mayor refinamiento al panel.
El volante multifunción ofrece buen grip y dispone de levas para el paso de marchas. La columna de dirección se regula en altura y profundidad, y sumado a los ajustes (manuales) de la butaca del conductor, la posición de manejo ideal se obtiene con facilidad.
Sobre el torpedo se ubica una pantalla de 8 pulgadas, que por su curioso diseño da la sensación de haber sido adquirida en un local “after market”. No obstante, la calidad de imagen es buena y rápida la respuesta del sistema táctil, mientras que la interfaz multimedia permite emparejar dispositivos con Apple CarPlay y Android Auto de manera inalámbrica.
Obedeciendo a la demanda tecnológica de los tiempos que corren, este modelo cuenta con cargador inductivo para teléfonos celulares y diversos tomas USB: dos en el panel frontal y dos en la consola central, apuntando a los pasajeros de atrás, que además dispondrán de ventilación con forzadores.
Dentro del habitáculo hay una buena cantidad de portaobjetos (incluso para botellas en las puertas traseras), pero lamentablemente el renovado SUV de Honda sigue sin ofrecer techo panorámico.
Una de cal, otra de arena
En la Argentina, el nuevo Honda HR-V está disponible en dos versiones (LX y EXL), ambas equipadas con el mismo motor naftero 1.5 i-Vtec con inyección indirecta y cadena de distribución (similar al del Civic), que entrega 121 CV de potencia y 14,87 kgm de torque, asociado con una transmisión automática de variador continuo tipo CVT (con siete marchas simuladas), que envía la tracción a las ruedas delanteras.
Cabe mencionar que en Brasil existe una variante denominada Touring, equipada con un 1.5 Turbo Flex (a etanol) de 177 CV y 24,3 kgm, pero lamentablemente fue descartada para nuestro mercado debido a las modificaciones que se deben hacer para adaptarla a nuestros combustibles.
Si nos centramos en el conjunto mecánico que toca analizar en esta oportunidad, debemos decir que existe un claro retroceso en comparación con la mecánica del HR-V de generación anterior, que utilizaba un propulsor (también aspirado) 1.8 de 140 caballos y 17,8 kgm de par máximo.
Las prestaciones obtenidas durante nuestras mediciones son elocuentes. Por ejemplo, la velocidad máxima es menor a la de su antecesor (183,1 vs. 196,2 km/h), como así también la aceleración de 0 a 100 km/h (12,4 vs. 9,3 segundos).
Lo mismo sucede con su capacidad para pasar de 80 a 120 km/h (8,5 segundos), una clara situación de sobrepaso en la que el nuevo HR-V necesita casi dos segundos más que el anterior y deja en evidencia el deslucido desempeño de esta caja y la escasa entrega de torque. Además de la tímida reacción, resulta un motor subido en revoluciones y con un notorio nivel sonoro. Si bien este modelo cuenta con levas y modo Sport, en la práctica no tienen mucha incidencia para mejorar la performance.
Ahora bien, en términos de rendimiento este impulsor resulta más eficiente que su antecesor: mientras que el HR-V de antigua generación alcanzaba un promedio de 12 km/l, el actual ostenta 13,8 kilómetros por cada litro de combustible, mejorando sus notas fundamentalmente en ruta.
A propósito de ese ámbito hay que destacar el correcto comportamiento dinámico: en líneas generales se lo advierte sólido y la carrocería evidencia poco rolido, a excepción de cuando se realizan maniobras exigidas, cuando puede mostrar alguna inclinación innecesaria, pero que es corregida rápidamente por el ESP.
Si bien no cuenta con suspensiones independientes en el eje trasero, es un auto muy cómodo para andar en ciudad. El tren delantero ofrece la rigidez justa para otorgar un agradable confort de marcha, y el despeje de la carrocería (casi 20 cm) es una gran aliada en calles dañadas. Tal como nos tiene acostumbrados la marca con todos sus modelos, la dirección eléctrica es muy suave.
Honda HR-V EXL: muy seguro (y caro)
Durante nuestras pruebas la respuesta de los frenos (con discos en las cuatro ruedas) fue muy eficiente; tanto es así que, para detenerse por completo desde los 100 km/h, el nuevo HR-V precisó de 41,5 metros, sin evidenciar fatiga del sistema o desviar su trayectoria lineal.
En el rubro seguridad está muy bien cubierto: además de los ya obligatorios ABS y ESP, ofrece de serie seis airbags, control de ascenso y descenso de pendientes, bloqueo de puertas traseras para niños, aviso sonoro y visual de cinturones para todos los ocupantes, anclajes para sillas infantiles, sistema de monitoreo de presión de neumáticos y el novedoso sistema Lane Watch que Honda está incorporando en muchos de sus modelos, y que al activar la luz de giro hacia la derecha, muestra en la pantalla central la imagen que capta una cámara ubicada debajo del retrovisor.
Asimismo, esta versión tope de gama EXL agrega el paquete de asistencias a la conducción (ADAS), denominado Honda Sensing, integrado por el sistema de frenado autónomo de emergencia, control de crucero adaptativo (con función Stop&Go), faros adaptativos y el sistema de mantenimiento y mitigación de salida de carril.
Al igual que su antecesor, el nuevo HR-V no es un vehículo de los más caros del segmento: la versión de entrada de gama (LX) cuesta 32.000 dólares, mientras que la utilizada para esta nota (EXL) vale 35.000 dólares: la mayoría de los concesionarios operan con esos valores en billete.
Mientras en el Congreso de la Nación se debaten leyes y DNU, el mercado automotor en la Argentina experimenta una situación tan surrealista que al cierre de esta nota muchas terminales no publicaban los precios oficiales de sus modelos en sus respectivos sitios web, a la espera de una resolución. Eso, además de ser poco serio, impide analizar en profundidad la competitividad de los actores de nuestro mercado.
FICHA TÉCNICA Y PRESTACIONES HONDA HR-V 1.5 EXL: