Las marcas chinas avanzan a nivel mundial y en América del Sur fueron acogidas con mucha estima en casi todos los mercados. En la Argentina, Chery fue la primera, pero Lifan, Geely y otras se van acomodando. En Brasil, la batalla es todavía más fuerte y algunos modelos son sus blancos, tal el caso del Renault Kwid, a quien la estatal JAC le apunto con una versión aventurera de su pequeño J2.
El nuevo producto de la casa francesa, próximo a arribar a nuestro país, ya se hace fuerte en Brasil, donde la compañía china tiene una importante presencia. No obstante, la terminal nacida en Hefei quiere dar un cambio de rumbo: dejará de lado los vehículos compactos y pasará a enfocarse en los SUV y los comerciales.
Con varios modelos que ya no están en oferta, próximamente tocará suelo brasileño el T20 (nombre local), conocido en China como S2 Mini y derivado del compacto J2. Tiene look aventurero, como muchas versiones que se venden con apliques y arreglos especiales para aprovechar el furor de los vehículos todoterrenos y crossovers.
Del J2 toma la estructura, pero posee una cara frontal más elevada, además de tener una impresión de mayor robustez y cambios en las parrillas y las ópticas.
Además, tiene un despeje al piso más pronunciado y posee notorios apliques en negro. Los espejos y el techo poseen un color diferente al resto de la carrocería, que en línea general conserva la forma del J2 original.
Las similitudes con el modelo tradicional se terminan afuera. En el interior, todo es diferente. Desde la calidad superadora de los materiales, a la pantalla táctil (que se eleva), los colores y el instrumental, hay muchos cambios.
El cuero con costuras en rojo abundan y realzan la sensación de mayor calidad del producto.
Hasta el momento, aunque no hay mayores precisiones de cuándo arribaría y sus precios, se indicó que tendría un motor 1.4 JetFlex (en Brasil se emplea la alconafta, mezcla de derivado del petróleo con caña de azúcar) de hasta 113 CV.
