Manejamos el nuevo BMW X4 xDrive 30i xLine

Es un vehículo completamente nuevo. Más grande que la serie anterior, su diseño es ahora más deportivo, característica que viene acompañada por el desempeño del grupo motopropulsor. Mejora la habitabilidad y también la capacidad del baúl. Galería de fotos

El universo automotor es un espacio de descubrimiento. A prueba y error, o con la convicción de estar desarrollando un producto revolucionario, los diseñadores muchas veces nos sorprenden con vehículos que, a primera vista, lucen arriesgados y hasta raros en algunos casos. Y si bien muchos de ellos quedan en el olvido, otros alcanzan la fama y marcan tendencia.

Básicos:
Velocidad máxima: 235,3 km/h / Potencia: 252 CV / Consumo promedio: 11,2 km/l / Precio: u$s 94.900

Diseño-aerodinámica (✭✭✭✭): Es más grande que el anterior, y su aspecto más deportivo. Excelente respuesta frente al viento.

Confort-espacio interior (✭✭✭✭): Destacada calidad general. Confortable para cuatro adultos: la plaza central es pequeña. La caída del techo puede molestar a quienes miden más de 1,80 m. También creció la capacidad del baúl.

Motor-prestaciones (✭✭✭✭): Dos litros turbo de excelente reacción y consumo contenido en ruta; en ciudad gasta mucho. Destacadas prestaciones.

Los más: Calidad general / Terminaciones • Posición de manejo • Respuesta del motor • Consumo en ruta • Capacidad del baúl.  

Equipamiento-instrumental (✭✭✭✭): La dotación de confort es interesante, pero en el rubro seguridad faltan elementos para un modelo de su precio. Instrumental digital configurable. 

Suspensiones-dirección (✭✭✭✭): Los trenes de rodaje rebotan mucho en la ciudad y son algo blandos para la ruta. Dirección de excelente respuesta.

Los menos: Visibilidad por la luneta / Caída del techo • Faltantes equipamiento de seguridad • Rueda de repuesto temporal • Consumo en ciudad • Precio.

Seguridad-frenos (✭✭✭✭): Frena muy bien y ofrece una dotación generosa, pero tendría que sumar más dispositivos de factura moderna.

Precio-garantía (✭✭1/2): Es caro. La garantía de tres años ó 200.000 kilómetros es muy buena.

BMW X4

En este último grupo se inscribe la historia de un estilo creado por Mercedes-Benz cuando en 2004 presentó el CLS, un enorme paquebote de cuatro puertas con aspecto de coupé. Las primeras críticas que este original producto cosechó no fueron las mejores: probablemente el mercado no estaba preparado para ese concepto rupturista. Pero, al poco tiempo, la propuesta de la casa de Stuttgart tuvo su revancha cuando otras compañías tomaron esa idea para empujarla hasta el lugar que hoy ha alcanzado, recordándole a propios y extraños que no todo está dicho en materia de diseño automotor.

Ese estilo se replicó con matices en productos de todos los segmentos, y una de las empresas que más lo aprovechó fue BMW, que encontró terreno fértil para explotarlo entre sus SUV. Así nacieron el X6 (2008), el X4 (2014) y el X2 (2018), tomando como referencia, respectivamente, los modelos X5, X3 y X1, aunque, claro, con estilo de coupé.

BMW X4

En la oferta actual de BMW en la Argentina aparecen todos estos modelos, pero es el X4 el que ahora llega renovado y al cual le dedicamos estas líneas. Hacemos foco en la versión de entrada, la xDrive 30i xLine, que con un precio de venta de 94.900 dólares se ubica en una posición intermedia frente a sus rivales. Hay otra opción, la M40i (motor 3.0 de seis cilindros y 354 CV), que con un valor de 133.900 dólares ocupa la posición más encumbrada.

Auto nuevo
La segunda generación del BMW X4 presenta varias modificaciones respecto de la anterior. Las que saltan a la vista aparecen en toda la silueta: el sector frontal dispone de un capó más agresivo y alargado (su diseño se acerca al del Serie 8), la parrilla está redimensionada y el parabrisas es más pequeño. Atrás parece más conservador (muestra ciertos puntos de contacto con el Serie 5 GT), y aunque mantiene la luneta chica con un pequeño alerón (la visibilidad no es la mejor), cuenta con nuevos grupos ópticos, además de un actualizado sistema de apertura del portón del baúl, el cual ahora es eléctrico y cuya tecla de accionamiento “se esconde” en el logotipo de la marca.

BMW X4

Protectores de aluminio en la parte baja de trompa y cola, zócalos externos y otros detalles (como las “falsas” branquias en los pasaruedas delanteros), le otorgan un toque de deportividad.
Las llantas, con neumáticos en medida 245/50 R19, muestran nuevo diseño, y por supuesto son de aleación, el mismo material que emplea la rueda de repuesto de uso temporal, una solución que a pesar de que no es la más apropiada para nuestro país, representa en este caso una buena noticia: al igual que esta, la serie anterior utilizaba neumáticos run flat, pero no disponía de auxilio.

Estilo confortable
La imponente carrocería (agrega 81 mm en el largo y 37 mm en el ancho respecto de la serie anterior) fue alivianada y ahora pesa unos 50 kg menos gracias a la incorporación de aluminio en mayores proporciones. Además, el centro de gravedad más bajo y otros ajustes determinan que la respuesta aerodinámica haya mejorado en torno al diez por ciento, para ofrecer un Cx de 0,30.

Lo más interesante en términos de dimensiones aparece en el incremento de la distancia entre ejes, que creció 54 mm (ahora es de 2.864 mm), cota que ha generado una mejora en la habitabilidad y que se traduce en un aumento en 27 mm en el espacio libre para las piernas de los ocupantes de las plazas traseras. Sin embargo, a pesar de esto, la caída del techo limita el confort para pasajeros de más de 1,80 m de estatura. Por su parte, la plaza central es pequeña y sufre la incomodidad que representa la presencia del túnel de la transmisión.

BMW X4

Los respaldos de ese sector se abaten en proporción 40/20/40 para ampliar la versatilidad del baúl, que en condiciones estándares ofrece ahora una capacidad de 525 litros.
Adelante, ambas butacas cuentan con estilo deportivo y múltiples ajustes eléctricos, entre los que se agrega el de los “pétalos” que se hinchan para conseguir una mejor contención del cuerpo. El volante (multifunción y con levas) se regula en altura y profundidad, dato que, sumado al anterior, garantiza una excelente posición de manejo.

Amplia dotación
Es lógico suponer que un vehículo que cuesta casi cien mil dólares está bien equipado, aunque por ese valor siempre se espera más. En el caso de este X4 estamos frente a un modelo que dispone de una dotación amplia pero que encuadra en la idea anterior: es decir, podría ser más completa.

En el listado que aparece en la página 49 encontramos, entre otros, techo panorámico, climatizador con salidas traseras, sistema de iluminación ambiente, asistente de estacionamiento, comandos por voz y una pantalla de diez pulgadas desde la que se comandan todos los sistemas y que sirve para ver las imágenes que transmiten las cámaras que conforman el sistema de visión 360.

BMW X4

Sin embargo, en este punto es necesario hacer una aclaración: para aprovechar al máximo este sistema es imprescindible dedicarle un tiempo prudencial para acostumbrarse a él; es tanta la información proporcionada, que por momentos genera confusión... Por ejemplo, si realizamos una maniobra de estacionamiento en un espacio muy reducido o atravesamos una estación de peaje estrecha, se activan todos los sensores y cámaras, invadiendo el habitáculo con estridentes alarmas sonoras y con las imágenes que llegan a la pantalla desde las cámaras que controlan el perímetros del vehículo, a las que se suman los indicadores que resaltan detalles específicos del entorno (cuadrantes de efecto 3D que van cambiando de color y posición conforme se mueve el vehículo) y una imagen virtual del auto que, en ocasiones, puede hacer creer al piloto que se trata de otro vehículo.

Si semejante despliegue de imagen y sonido eleva su nivel de estrés, el conductor puede desactivar el sistema. Como siempre, todos los dispositivos se gobiernan desde el comando circular (con movimiento tipo joystic) ubicado en la consola central.

BMW X4

En seguridad notamos varias ausencias, entre ellas: sensor de ángulo ciego, airbag de rodillas para el conductor, control de velocidad crucero adaptativo, sistema de frenado automático de emergencia y alerta de cambio involuntario de carril, entre otros.

En cuanto al instrumental, sólo palabras de elogio. Dispone de un tablero digital (aunque su diseño emula a los clásicos analógicos de la marca) que cambia de diseño y color con cada uno de los modos de conducción que propone el sistema electrónico: mayormente celeste, sin tacómetro y con información relacionada principalmente con el consumo y la autonomía en el modo Eco; formato estándar cuando se activa la opción Comfort, y con mucho rojo y la velocidad como protagonista central con tipografía grande, si se opta por Sport.

BMW X4

Dentro de esta opción, el conductor puede elegir entre las configuraciones Standar, Plus e Individual, y ofrece la posibilidad de desplegar en la pantalla de diez pulgadas dos nuevos indicadores, uno de potencia (en kW) y otro de par motor (en Nm). Al elegir la tercera variante, el sistema permite modificar las respuestas de dirección, motor y caja para darle a este SUV de más de 1,8 toneladas de peso una destacada respuesta deportiva que se materializa en las prestaciones: 235,3 km/h de velocidad máxima (en sexta) y 6,9 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h.

En este punto también le cabe una gran responsabilidad a la caja automática de ocho velocidades (con comando tipo joystic, posición manual secuencial y levas en el volante), bien relacionada y que lleva el par a las cuatro ruedas a través del sistema inteligente xDrive. Además, con el ajuste que le aporta la posición Sport Individual mejora los tiempos de paso de marcha para sacar el mejor provecho de los 252 CV de potencia y los 35,7 kgm de torque del motor 2.0 biturbo.

BMW X4

Las virtudes de esta caja aparecen, por otra parte, en las destacadas medidas de consumo en ruta, situación que no se repite en la ciudad, ya que a pesar de su eficacia, el sistema no puede contener la voracidad del propulsor. Por eso, cuando el X4 30i xDrive circula a 90 km/h en la ruta, el rendimiento es de 15,8 km/l, pero en el ámbito urbano se reduce a 7,8 km/l.

En cuanto a la suspensión, a pesar de lo equilibrado de los trenes de rodaje, las enormes ruedas de 19 pulgadas manifestaron algunos rebotes molestos en ciertas ocasiones, pero demostraron firmeza en la ruta.
Los frenos, por su lado, respondieron de manera impecable: sin generar ruidos ni movimientos extraños, lograron detener al X4 en distancias muy cortas. Por ejemplo, para frenar por completo desde 120 km/h recorrió 55,9 metros.

BMW X4

Caro... ¿y los otros?
Al cierre de esta edición, el mercado automotor local trataba de reacomodarse tras el sacudón que representó la devaluación posterior a las PASO. Con un dólar cercano a los 60 pesos, la única palabra que define a un vehículo que se vende por 94.900 dólares es “caro”.

Sin embargo, cuando analizamos el segmento en el que el BMW X4 30i xDrive xLine debe competir, entendemos que ese valor lo ubica en una posición intermedia, ya que hay unidades más baratas y otras más caras. Entre los primeros podemos mencionar al Audi Q5 que, con la misma potencia y equipamiento similar al del X4, se vende por 76.940 dólares, mientras que en el otro extremo aparece el Land Rover Range Rover Velar, con motor de 250 CV y a un precio de 141.900 dólares.

En cuanto a la garantía, BMW de Argentina ofrece una cobertura muy buena para este producto: tres años o doscientos mil kilómetros.

FICHA TÉCNICA Y PRESTACIONES