Las alianzas entre distintas marcas a veces pueden traer diferentes alternativas teniendo en cuenta un mismo modelo. ¿Cómo es eso? Es sencillo, un vehículo lanzado por una compañía puede ser tomado por la empresa socia y gracias a algunos trabajos de diseño y de equipamiento, le cambian el logo y la denominación con el objetivo de lanzar un "hermano gemelo".
Si bien durante bastante tiempo hubo cierto "coqueteo" con algunos países de la región, General Motors siguió una estrategia similar en algunos mercados con su firmas socias provenientes de China como SAIC, Wuling y Baojun. De esta manera, el grupo automotor estadounidense lanzó varios modelos con el logo de Chevrolet en varios países latinoamericanos.
Entre ellos hubo una serie de integrantes de diferentes segmentos que podrían llegar en algún momento a la Argentina como el Chevrolet Groove (SUV por debajo de Tracker), nuevo Captiva, S10 Max, e incluso se utilizó la planta de SAIC en China para producir al sustituto del Cruze, conocido como Monza o Cavalier.
Más allá de la alianza, una de las novedades de los últimos días, fue un inédito hatchback de origen Wuling, debido a que en el próximo tiempo será adoptado por Chevrolet para dar vida a un nuevo cinco puertas. El objetivo es comercializarlo en mercados emergentes, entre los cuales aparecen países de Asia, América Latina y algunos de África.
La plataforma utilizada será la misma que la GEM de Onix, mientras que contaría con motores aspirados y turbo de 1.5 litros. Por el momento, las patentes muestran sólo el exterior, mientras que se difundió una fotografía del interior.
Todavía falta para su arribo como Chevrolet a la región, pero habrá que tener en cuenta dos cuestiones. En primer lugar, cómo se posicionará frente a la familia Onix, y en segundo lugar, cuáles serán los países que lo tendrán dentro de su gama. Durante los últimos años, México fue una buena alternativa para los derivados chinos, pero ¿tendrá en Argentina alguna posibilidad?
