@TogneriWalter
waltertogneri5La marca del óvalo cerró 2023 ofreciendo en nuestro país cinco modelos electrificados, en su avance para cumplir la promesa que hiciera años atrás: brindar por lo menos una variante de propulsión alternativa de cada uno de los productos de su oferta. Con ellos, la casa del óvalo “hace punta” pensando en un futuro en el que se anticipa que los vehículos “ecológicos” serán protagonistas.
Básicos:
Velocidad máxima: 191,6 km/h / Potencia: 203 CV / Consumo promedio: 14,6 km/l / Precio: N/D
Diseño/Aerodinámica (✭✭✭✭): Elegante, distinguido, el estilo del renovado Kuga hace que se destaque en el tránsito.
Confort/Espacio interior (✭✭✭✭): Amplio y con muy buena calidad de materiales y terminaciones. La plaza central, pequeña.
Motor/Prestaciones (✭✭✭✭): El equipo híbrido responde con muy buenas prestaciones, pero el consumo en ciudad podría ser mejor.
Los más: Renovación estética • Habitabilidad • Nivel de equipamiento.
Equipamiento/Instrumental (✭✭✭✭1/2): La dotación de la que dispone cubre todas las necesidades. Solo desentona la rueda de repuesto temporal.
Suspensiones/Dirección (✭✭✭✭): Buena dinámica, a pesar de que se trata de un vehículo grande, pesado.
Transmisión/Caja (✭✭✭✭): La tracción integral le permite avanzar por terrenos de cierta complejidad, pero no es un vehículo creado para tal fin.
Los menos: Consumo urbano comparado • Rueda de repuesto temporal • Precio.
Seguridad/Frenos (✭✭✭✭): Muy completo en este rubro con ADAS y siete airbags. Además, frena bien.
Precio/Garantía (✭✭1/2): No hay precio oficial ni sugerido por la marca. Los que aparecen lo ubican como un producto muy caro. Garantía correcta.
El último –el Mustang Mach-E, la reinterpretación ciento por ciento eléctrica del legendario pony-car, ahora con formato de SUV– fue presentado aquí cuando el 2023 llegaba a su fin. Pero unos meses antes (en agosto) había arribado el nuevo Kuga Hybrid, con el objetivo de “empujar” este segmento en la oferta de Ford.
Efectivamente, la variante híbrida del Kuga desembarcó por primera vez en nuestro mercado en 2020 para iniciar la avanzada de la marca entre las unidades con este tipo de motor.
Es un SUV de categoría que está muy bien parado frente a una competencia que, de a poco, va presentando sus cartas. Por eso la actualización de este producto es clave en la estrategia de la marca.
Allá, Escape
El nuevo Kuga llega a nuestro país importado desde los Estados Unidos, país en el que se comercializa con el nombre de Escape, el cual, a su vez, remite a un SUV que se vendió en nuestro mercado a principios de la década del 2000, aunque no tuvo aquí una vida prolongada.
La actualización del Kuga Hybrid apela a retoques de diseño que buscan adaptar el estilo a las nuevas tendencias del mercado.
Mantiene dimensiones compactas (aunque en nuestro mercado es un SUV mediano), y a pesar de que la silueta no ha cambiado en términos estructurales, el “refresh” que ha recibido transmite la sensación de que hay más curvas en esta carrocería que en la anterior. Esa imagen nace en parte del nuevo sector frontal (cambian paragolpes, capó, parrilla) en el que los faros son nuevos (full led) y suman como detalle de personalidad una línea de led que los une, la misma solución que aparece en modelos tales como, por ejemplo, el Volkswagen Taos y la Tesla Cybertruck.
Los laterales no tienen cambios (sí se agregaron unos detalles en símil fibra de carbono), lo mismo que el remate posterior, en el que solo se modificó la ubicación de los faros dentro de las ópticas.
Del mismo modo que la versión anterior, el nuevo Kuga calza llantas de aleación de 19 pulgadas con neumáticos en medida 225/55, y la rueda de repuesto es de uso temporal.
Alto nivel
Del mismo modo que la mayoría de los modelos que compiten en su segmento, este Ford presenta altos estándares de calidad. El habitáculo es un espacio que muestra jerarquía, en el que prevalecen materiales, terminaciones y encastres de primera.
Los tapizados son de símil cuero y en las butacas (ambas eléctricas y calefactables; la del conductor con memorias) dibujan un diseño muy llamativo, moderno, que mejora la percepción, tendiendo al lujo.
Esos ajustes de la butaca del piloto, en combinación con los de la columna de dirección (altura y profundidad) facilitan la maniobra para encontrar la mejor posición de manejo, ubicación desde la cual el conductor tendrá todo al alcance de su mano a partir del tablero ciento por ciento digital (de 12,3”) y la enorme pantalla táctil (13,2”) del sistema de infoentretenimiento (que ofrece una gran cantidad de información incluyendo, además, la de gestión de la energía a través de gráficos de alta definición), además del Head-Up Display.
Desde el punto de vista del accionamiento de los comandos, la única que puede representar un inconveniente es la selectora del tipo radial, aunque acostumbrarse a ese movimiento no demanda demasiado tiempo.
El sector posterior es realmente muy generoso en términos de espacio habitable. Dos adultos podrán viajar con total comodidad en las plazas laterales, con suficiente espacio libre tanto para las piernas como para la cabeza. La posición central es más pequeña, lo que limita el confort para un adulto en un viaje largo.
Esos asientos ofrecen dos movimientos que permiten modificar las condiciones de habitabilidad: se desplazan longitudinalmente y los respaldos se reclinan. Tales ajustes también se pueden aplicar para modificar la capacidad del baúl, que es de 518 litros “hasta el techo”. Si bien las primeras unidades del Kuga que llegaron hasta estas tierras no traían una bandeja o cobertor en el baúl, ahora este modelo dispone de un “separador” tipo “media sombra”.
El punto fuerte de este vehículo es el equipamiento. Está preparado al nivel de los mejores, con una dotación en la que se destacan, además de los mencionados más arriba, acceso “sin llave” con código en el parante, climatizador automático con salidas traseras, techo panorámico, el excelente equipo de audio Bang & Olufsen, cargador inalámbrico para celulares y la posibilidad de conectar teléfonos celulares con el sistema multimedia de forma inalámbrica.
En materia de seguridad agrega una muy completa dotación con el sistema de asistencia a la conducción CoPilot 360 que ofrece, entre otros, cámara de 360º, sensores de estacionamiento delanteros y traseros, control de velocidad crucero adaptativo con sistema "Stop & Go", alerta de punto ciego, lector de señales de velocidad y los “novedosos” asistentes de dirección evasiva y de frenado en marcha atrás, a lo que se suma el sistema de estacionamiento asistido en paralelo y perpendicular.
Los ocupantes de las plazas traseras disponen de puertos USB, pero del tipo C. Hay uno del tipo A en el sector delantero. También tomas de 12 V, incluso una en el baúl.
Que sea menos
Esta actualización del Kuga Hybrid emplea el ya conocido equipo propulsor conformado por el motor 2.5 Atkinson de 161 CV y 21,4 kgm de torque, y un generador eléctrico de 130 CV y 13,8 kgm, respectivamente, que en conjunto entregan 203 CV que son administrados por una caja eCVT que reparte el par entre ambos ejes. A diferencia de otros modelos de su clase, aquí la conexión con el segundo eje se realiza a través de un cardan, es decir que el motor eléctrico no mueve las ruedas traseras directamente.
Es un equipo que funciona muy bien, aunque cuando está en modo ciento por ciento eléctrico emite un sonido particular, una suerte de vibración de baja frecuencia que se percibe claramente. En los momentos en los cuales toma la posta el de combustión, la rumorosidad aumenta, aunque sin sacrificar “la paz interior”.
Esa combinación entre ambos motores es la solución de la que disponen los modelos de este tipo y cuyo objetivo es consumir la menor cantidad de combustible posible. Recordemos que en los vehículos híbridos, el motor eléctrico recibe energía de un pack de baterías de iones de litio, las cuales se recargan a partir de la electricidad que generan el motor a combustión y el sistema de freno regenerativo. Este modelo no es del tipo Plug-In, motivo por el cual las baterías no se recargan tomando energía de una fuete externa, como, por ejemplo, un cargador de estación de servicio o domiciliario.
Dependiendo de las condiciones de circulación, funcionan el motor a combustión o el eléctrico en forma individual, o ambos al mismo tiempo.
Gracias a esa combinación, el mejor momento de este tipo de mecánica (en términos de consumo comparativo) aparece en el ámbito urbano, aunque hubiéramos esperado mejores números. En nuestras pruebas medimos un rendimiento promedio en la ciudad de 12,5 km/l, los cuales, al vincularlos con las marcas que obtuvimos en la ruta, dieron por resultado un rendimiento promedio global de 14,6 km/l, una muy buena marca, pero algo “amarreta” para un vehículo cuyo objetivo principal es gastar la menor cantidad de combustible posible.
Probablemente esto se deba a la capacidad de las baterías la cual, al descargarse rápidamente, demanda mayor participación del motor a nafta.
El resto de las prestaciones se mantienen a la altura de un modelo de su tipo: 191,6 km/h fue la velocidad máxima, mientras que en la prueba de aceleración de 0 a 100 km/h marcó 8,1 segundos.
Es interesante destacar, además, el comportamiento dinámico de este SUV de grandes dimensiones y un peso en orden de marcha de 1.663 kg, ya que, a pesar de que en alguna curva rápida mostró cierta tendencia a “sacar la trompa”, siempre fue muy firme y predecible. Aquí cobran importancia los esquemas de suspensión, que respondieron con gran aplomo y que, además, y a pesar de las enormes ruedas de 19 pulgadas y perfil bajo, transmitieron confort a los ocupantes del vehículo. La dirección: excelente.
En cuanto a los frenos, también palabras de elogio: el sistema con cuatro grandes discos logró detenerlo por completo en distancias correctas y sin tendencias a perder la recta.
¿Y el precio?
Me gustaría que ustedes, queridos lectores, pudieran percibir el malestar que me genera tratar de explicar lo inexplicable. Me parece una gran falta de respeto que las automotrices no publiquen los precios de venta de los modelos que comercializan. Me conformaría con que fueran “orientativos”. Pero, en lugar de eso, casi todas las marcas agregan una plaquita que reza: “Solicitar cotización”. Increíble.
Por eso, para encontrar un precio con el cual comparar al Kuga Hybrid Platinum AWD con sus rivales, en esta oportunidad tuve buscar en los portales más populares. No tengo ningún problema con ellos, pero ¿acaso los precios que publican son oficiales? Obviamente, no. Así que quien decida comprar este vehículo queda librado a su suerte, navegando en valores que se mueven entre los 72.000 y los 96.000 dólares.
En esos importes aparecen también los rivales de este Ford, los cuales son básicamente dos: el Toyota RAV4 Hybrid y el Nissan X-Trail ePower. Son productos muy parecidos, aunque, por supuesto, cada uno tiene su particularidad. El X-Trail ofrece una mecánica distinta, ya que el motor naftero hace las veces de generador para cargar las baterías que alimentan al propulsor eléctrico, es decir que el de combustión no impulsa las ruedas como sí sucede en los otros dos.
El RAV4 es apenas más largo que aquellos (el Nissan es el más corto de los tres), pero es también el más potente (222 CV, combinados) y el que ofrece el baúl más generoso (733 litros), aunque tiene menos ADAS y una pantalla más pequeña (8 pulgadas).
El X-Trail cuenta con 205 CV, pantalla de 12,3”, ADAS y un baúl de 485 litros, pero, a diferencia de los otros dos, dispone de tres filas de asientos.
Si bien los precios son impredecibles, sí hay certezas en los plazos de garantía. Ford cubre a este modelo por tres años o 100.000 kilómetros y por 8 años o 160.000 kilómetros para los componentes del sistema de alta tensión.
Ficha Técnica, prestaciones y equipamiento
